“Blanca es una mujer muy noble y educada”
Blanca Thiebaut es madrileña, tiene 30 años y es ingeniera técnica agrícola Vivía en Barcelona con su novio, un joven de origen francés, que también está en Africa con MSF
La organización Médicos sin Fronteras ha revelado hoy el nombre de la joven secuestrada en Kenia junto a Montserrat Serra Ridao, profesora de instituto en Girona: se trata de la madrileña Blanca Thiebaut, de 30 años, ingeniera técnica agrícola, que vivía en Barcelona hasta hace poco. El padre de la joven, telefoneado por EL PAíS, ha rehusado de momento dar información y se ha remitido a MSF. La familia, no obstante, ha mostrado su extrema preocupación por el estado de la joven.
Con las llaves en la mano, abriendo la puerta de un piso barcelonés, la ocupante de la vivienda se queda sorprendida con la noticia. “¿La han secuestrado? No me lo puedo creer”. Es la inquilina del piso de Thiebaut, una mujer de origen francés que alcanza a explicar que vive en el piso de Blanca el tiempo que ella está en Kenia, y es prima de su novio.
Thiebaut reside desde hace al menos tres años en un edificio reformado, en el corazón del barrio barcelonés del Born, como explica el portero de la finca, Paulino Sánchez, que la considera “como una hija”.
Sánchez cuenta que esta es la segunda vez que Blanca viaja con MSF. La mujer se fue antes de las vacaciones de Navidad, “un mes y medio”, recuerda. Para las fiestas regresó a Barcelona, donde estuvo hasta agosto aproximadamente. En verano, cuando Sánchez se encontraba de vacaciones, volvió a marchar. Como despedida, le dejó una carta donde le contaba que partía de nuevo a África por trabajo.
En la misiva, relataba que su novio, también ingeniero, de origen francés, viajaría al continente africano con MSF. “Pero a sitios distintos, aunque decía que se encontrarían”, cuenta el hombre, por teléfono. El joven ingeniero vive con Thiebaut en el piso de Barcelona desde que ella volvió de su primer viaje con MSF, según el conserje.
En su tiempo en Barcelona, Blanca siguió clases de catalán, asegura Paulino. La define como “una mujer noble, muy educada y muy guapa”. En el edificio, los vecinos recuerdan verla entrar y salir con su perra. Pero pocos la conocen. “Hay muchas viviendas de alquiler para turistas”, justifica una pareja.
Gestora medioambiental
Thiebaut se presenta a sí misma en una web de contactos profesionales como gestora medioambiental especializada en desarrollo sostenible. Antes de unirse a MSF, la cooperante secuestrada trabajó un año, entre 2007 y 2008, en la empresa Tragsatec, dedicada al desarrollo de ingeniería y a la tecnología en materia agrícola, forestal, de desarrollo rural, medioambiente y medio marino.
Entre 2004 y 2005, según su curriculum vitae, Thiebaut dio clases de dibujo técnico y topografía a estudiantes de primero de carrera, en la academia Isaac Peral, de Madrid.
La joven secuestrada, que estudió Ingeniería Técnica Agrícola en la Universidad Politécnica de su ciudad natal, amplió su formación en la Universidad de Queensland, en Australia, donde cursó un máster en gestión medioambiental. Recientemente obtuvo un diploma en Política por la London School of Economics and Political Science, de la Universidad de Londres.
La madre de Thiebaut, Marina Lovelace, es directora de un colegio bilingüe madrileño. Su padre, Carlos Thiebaut Luis-Andre, es filósofo y catedrático de Filosofía en una universidad de Madrid.
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