951 ciudades en 82 países (por ahora) se suman a la protesta planetaria del 15-O

Es indudable que el Movimiento 15-M domina, además de medios innovadores, trucos clásicos para difundir sus convocatorias. "URGENTE: El príncipe Felipe tiene una cita este sábado 15-O, ¿acudirá?", era uno de los muchos comentarios sobre la protesta que se podían leer ayer en Twitter. La escena con el Príncipe, grabada precariamente por los activistas y difundida en Internet, se convirtió inmediatamente en un gran reclamo de las protestas. Indignados de 951 ciudades (incluidas 60 españolas) en 82 países (de Albania a Venezuela) han anunciado que saldrán a la calle bajo el lema Unidos por un cambio global. Esta página web recoge todas y cada una de las convocatorias. Este mapa recoge información actualizada de dónde y a qué hora es exactamente cada una.

Un activista del 15-M invitó este jueve oficialmente a don Felipe a la protesta planetaria. El joven se le acercó en la Campus Party de Granada y le entregó una pegatina de la marcha. El heredero cogió el adhesivo, dio las gracias y siguió su camino.

Los organizadores de la movilización (miles de personas que se coordinan por Internet y en reuniones) llaman a la ciudadanía a "reapropiarse de la política mediante la participación directa en la vida social, política y económica" y reclaman "una democratización de la economía y de la gobernanza", según el manifiesto consensuado por indignados de 15 países que se reunieron en Barcelona.

"Esto es un movimiento de presión ciudadana para que ellos [los políticos] hagan su trabajo", aseguraba un miembro del 15-M en la presentación de la marcha. "Es muy fácil movilizar a la gente cuando el 99% oprime al 1%", declaró confiada una activista. La del sábado es una cita que el 15-M ideó la primavera pasada como una protesta europea para después del verano y pretende convertirse en una protesta en los cinco continentes. La manifestación quiere ser "pacífica, sin banderas ni logos".

En Madrid, la protesta culminará con dos asambleas en la Puerta del Sol que abordarán, entre otros asuntos, el futuro del movimiento. "Si alguien decide acampar, lo hará bajo su responsabilidad. Queda claro que nosotros no convocamos ninguna acampada", explicó una representante del 15-M. Cinco meses después de su primera manifestación, el Movimiento 15-M ha modificado muy levemente el lema de su estreno: Seguimos sin ser mercancía en manos de políticos y banqueros.

A preguntas de los periodistas, los representantes de 15-M explicaron que ante las elecciones generales, el 20 de noviembre, se limitan a "instar a la ciudadanía a que analice de manera responsable las distintas opciones y vote en consecuencia". Han asegurado que "el resultado [del 20-N] no va a variar la dinámica del movimiento".