Cobo no recuerda nada del accidente y pregunta si hubo más implicados

El viceacalde de Madrid, Manuel Cobo, continúa evolucionando favorablemente de las heridas que sufrió en un accidente de moto la noche del día 30. Aunque sigue ingresado en la Unidad de Medicina Intensiva del hospital madrileño de La Paz, su pronóstico ha pasado hoy de "grave" a "reservado". Está plenamente consciente y se le ha retirado la intubación. También ha empezado esta mañana a hablar, han informado fuentes municipales. Sin embargo, Cobo, de 55 años, no recuerda nada de lo que ocurrió y ha preguntado si hubo más implicados en el siniestro. El vicealcalde ha preguntado también si se ha enterado mucha gente del accidente.

El último parte médico, hecho público a las doce y media por el hospital, afirma que Cobo sigue en la Unidad de Medicina Intensiva por politraumatismo y que presenta una "evolución favorable tanto desde el punto de vista neurológico como respiratorio". "El paciente se encuentra bajo tratamiento en dicha Unidad, estable hemodinámicamente, consciente y en respiración espontánea tras haber sido desintubado la noche de ayer. Su pronóstico es reservado", añade el parte.

Aunque el parte no dice nada al respecto, las mismas fuentes municipales han adelantado que la evolución del estado de salud de Cobo es tan favorable que los médicos se están planteando incluso pasarle a planta mañana mismo. El parte emitido ayer señalaba que Cobo presentaba una "evolución neurológica favorable" y que las pruebas practicadas descartaban daños cerebrales, aunque su pronóstico seguía siendo "grave". Cobo, que sufrió traumatismos craneoencefálico y torácico en el accidente, ocurrido hacia las nueve de la noche del pasado martes en una salida de la carretera de Castilla, permanecía ayer grave, "intubado y estable hemodinámicamente, y con evolución neurológica favorable".

El alcalde, con la familia

De nuevo, Cobo ha recibido la tempranera visita del alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, que ha acudido a las nueve de la mañana a La Paz. Ruiz-Gallardón, que suspendió ayer todos los actos de su agenda y que apenas se despegó del vicealcalde en todo el día, ha charlado durante una hora con la familia de su número dos. Después, ha presidido la primera reunión de su Gobierno después de las vacaciones, tras la que no ha habido comparecencia ante la prensa. Al acabar la cita, se han acercado al hospital el resto de los miembros del Gobierno municipal.

Un reguero incesante de amigos y representantes políticos siguen desfilando por el centro hospitalario interesados por el estado de salud de Cobo, informa Samira Saleh. Ayer, Gallardón estuvo allí desde poco antes de las ocho de la mañana para seguir de cerca la evolución de su amigo y colaborador hasta las dos y media. A las cinco de la tarde, regresó al hospital donde recibió a la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, y al líder, Mariano Rajoy.

Todas las miradas no pierden de vista las puertas del centro sanitario, atentas a quién entra, quién sale, quién está y, sobre todo, quién falta. Falta, especialmente, Esperanza Aguirre, quien no ha pasado por el centro. "Aguirre ha estado en contacto con el alcalde y hemos hecho lo normal en estos casos, que es interesarnos y dar el apoyo que hemos podido", justificó ayer Ignacio González.

Por lo dicho al respecto esta mañana por la propia Aguirre, parece que tampoco hoy irá a verle. Tras el Consejo de Gobierno, Aguirre le ha deseado "un pronto y total restablecimiento" y ha asegurado que está "totalmente informada" sobre su estado a través del alcalde de Madrid, del vicepresidente regional y del consejero de Sanidad y de los propios médicos que atienden a Cobo, con los que ha hablado. Preguntada sobre por qué no le ha visitado aún en el hospital, Aguirre ha explicado que no tiene "nada" que comentar