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Txeroki se niega a declarar por no admitir legitimidad de la Audiencia para juzgarlo

La fiscalía pide 377 años de prisión por 20 delitos de asesinato terrorista en grado de tentativa La Audiencia Nacional condenó en marzo a Ilari y Sendoa a la misma pena por este atentado El caso ha quedado hoy visto para sentencia

El ex jefe militar de ETA Garikoitz Aspiazu Rubina, Txeroki, ha regresado hoy a la Audiencia Nacional para ser juzgado por su participación en el intento de asesinato de la teniente de alcalde de Portugalete (Vizcaya) Esther Cabezudo, el 28 de febrero de 2002. La fiscalía pide 377 años de prisión por 20 delitos de asesinato terrorista en grado de tentativa y uno de estragos. Este es el segundo juicio al que se enfrenta Txeroki desde que fue entregado temporalmente por las autoridades francesas. Hoy ha quedado visto para sentencia.

Txeroki ha insistido en la misma estrategia de siempre. El etarra se ha negado a declarar al no reconocer la legitimidad de los tribunales españoles para juzgar a un vasco. "No les doy legitimidad para juzgar a nadie del Pais Vasco. No voy a contestar a ninguna pregunta", ha afirmado. El ex jefe militar de ETA se ha negado incluso a contestar a su abogada.

"Ahora no duermo una noche seguida", ha dicho Esther Cabezudo en el juicio. También su escolta ha afirmado que el atentado le arruinó la vida. "Me marché del Pais Vasco y no he vuelto a trabajar".

El exjefe militar de ETA Garikoitz Aspiazu, Txeroki.
El exjefe militar de ETA Garikoitz Aspiazu, Txeroki.EFE

Después de que el tribunal declarara visto para la sentencia, el ex jefe de ETA se ha despedido de los familiares y amigos que han acudido al juicio al grito de "Jo ta ke (dale que te pego)".

La Sección Primera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional ya condenó en marzo a la misma pena por este atentado a los miembros de ETA Idoia Mendizabal, Ilargi, y Asier Arzalluz Goñi, Sendoa.

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Txeroki está acusado de planear la muerte de Cabezudo como integrante del comando Olaia, al colocar un artefacto explosivo al paso de su coche. Él y los dos condenados instalaron en un carrito de la compra una bomba de gran potencia destructiva que activaron al paso de la teniente de alcalde, según el escrito de conclusiones provisionales de la fiscalía. No consiguieron lo que querían porque aquel día Cabezudo circulaba, junto a sus escoltas, por la acera contraria.

La explosión provocó 20 heridos y daños materiales en los edificios colindantes valorados en un millón de euros.

Segundo juicio

La Sección Cuarta de la Audiencia Nacional absolvió a Txeroki el pasado 30 de junio al no encontrar pruebas de que participase en el intento de asesinato del entonces presidente del Consejo de Administración del Grupo Correo, Enrique Ybarra, el 17 de enero de 2002. La fiscalía pedía 15 años de cárcel.

El fiscal Pedro Rubira defendió como principales pruebas una pericial de inteligencia según la cual el atentado fue cometido por el comando K-Olaia, al que pertenecía Txeroki en el momento de los hechos, y retos biológicos del sospechoso encontrados en la vivienda que ocupaban los integrantes de este grupo. El tribunal consideró, sin embargo, que el "único resultado objetivo e inequívoco" de estas diligencias es la "estancia del acusado" en esa vivienda. 

Txeroki, el etarra que dinamitó la tregua de 2006

Txeroki, de 38 años (Bilbao, 6 de julio de 1973), siempre ha estado vinculado al mundo de la izquierda abertzale. Su salto a ETA se produce con colaboraciones en el comando Vizcaya hasta el año 2002, cuando huye a Francia después de que mueran cuatro amigos suyos. Allí se puso a las órdenes del entonces número uno del entramado militar de ETA, Gorka Palacios. Cuando este fue detenido en diciembre de 2003, Txeroki tomó el relevo como jefe militar.

A este etarra se le atribuye el asesinato del juez José María Lidón y de los guardias civiles Raúl Centeno y Fernando Trapero en Capbreton (Francia), así como el atentado con bomba lapa que mutiló a Eduardo Madina, hoy secretario general del Grupo Parlamentario Socialista en el Congreso. Fue el encargado de crear, entre otros, el comando Urederra y de planificar los atentados que se produjeron entre 2003 y 2008, lo que lo convirtió en el terrorista más buscado en España.

Aprovechó el alto al fuego de 2006 para rearmar y proteger a sus comandos de la policía, pero poco a poco se hizo fuerte en la directiva de la organización terrorista, en la que defendía posiciones contrarias a la tregua. En diciembre de aquel mismo año decidieron terminarla con el atentado en el aparcamiento de la Terminal 4 del aeropuerto de Barajas (Madrid).

Txeroki fue detenido en la localidad francesa de Cauterets en noviembre de 2008 y un año después, las autoridades francesas lo entregaron a España temporalmente para que se le notificasen los autos de procesamientos de cinco de los 21 procesos que tiene abiertos en la Audiencia Nacional. | M. C. B.

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