¿Dónde están las becas y las ayudas?
Los lectores opinan sobre las ayudas al estudio, la dificultad de los jóvenes para acceder a un alquiler, la quinta ola y sobre las pensiones
Llevo días intentando enterarme de las becas existentes para un crío que quiere hacer una FP de tecnología, que quiere estudiar, y me resulta muy difícil dar con el sitio oportuno, con el correo o el teléfono correcto, por no decir una oficina presencial, algo imposible en tiempos de covid, pero necesaria. Sin una beca que cubra tasas y materiales, este joven tendrá muy complicado estudiar, mejor dicho, no podrá estudiar. El sueldo de su madre no llega para todo. El que el padre se quedara sin trabajo por la última crisis, tampoco. Es muy duro ver que gente que quiere superarse y se esfuerza no tenga los recursos que necesita. Y sin formación no se puede prosperar. No quiero hacer demagogia partidista. Se trata de que la sociedad, la Administración, están fallando. Se trata de ayudar a alcanzar las herramientas que le permitan a uno prosperar y tener un futuro, se trata de una beca para estudiar.
Norma Nieto Nieto. Madrid
Jóvenes, la odisea de alquilar
La búsqueda de vivienda en Madrid para un joven recién graduado de máster y con trabajo se está convirtiendo en una misión difícil. Asumida la necesidad de compartir, hay que luchar contra prejuicios que, de dirigirse a cualquier otro colectivo, nos harían poner el grito en el cielo. Aceptamos, por ejemplo, como algo normal que los anunciantes de pisos en plataformas virtuales incluyan en sus mensajes expresiones como “preferiblemente chicas”. Nos cuesta un poco más aceptar que los propietarios deshagan un trato firmado ya con la agencia inmobiliaria al saber que se trata de tres chicos a quienes no conocen de nada. Es obvio que cada cual puede alquilar su piso a quien prefiera pero, sinceramente, deberíamos empezar a entender el mundo de otra manera, sin prejuicios de ningún tipo, tratando a cada individuo como lo que es: una persona con derechos.
Mercedes Villegas López. Alicante
Cinco veces
No dos veces tropezando con la misma piedra, sino cinco. Las consecuencias de los felices viajes de fin de curso no las previeron los padres —los hijos aún no tienen la madurez suficiente a los dieciocho años—, ni los tertulianos, ni los medios de comunicación, ni los gobernantes, ni millones de ciudadanos. Solo lo han previsto los sanitarios, que desde el primer día piden una prudencia que despreciamos. No hemos aprendido nada en año y medio de pandemia.
Jaime de Nepas. Majadahonda (Madrid)
Más sobre pensiones
Al hilo de toda la polémica generada con el ministro José Luis Escrivá en cuanto a las pensiones y los baby boomers, yo quiero hablar del esfuerzo que hemos realizado los de mi generación. Porque yo, como tantos miles de personas en este país, dejé los estudios a los 16 años para ponerme a trabajar: en estos momentos llevo 45 años cotizando a la Seguridad Social. Ahora, si quiero jubilarme dos años antes de la edad estipulada, se me penaliza a pesar de llevar todos esos años cotizados. Por otra parte, una persona que lleve 37 años cotizados, por ejemplo, y cumpla con la edad de jubilación no tiene que asumir ninguna penalización habiendo contribuido ocho años menos. Por favor, que alguien me lo explique porque no lo entiendo.
José Manuel López Liste. Barcelona
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