_
_
_
_
COLUMNA
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las columnas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Dedos

Cuando comienzo un relato, llevo mucho cuidado con esto, con empezarlo. De hecho, me preocupa más comenzarlo que terminarlo

Juan José Millás
Una sala del cine Comedia de Barcelona.
Una sala del cine Comedia de Barcelona.Joan Sánchez

Ayer vi por la tele una película que a los 10 minutos de empezar no había comenzado. En tales circunstancias, corto y escojo otra. Pero a veces sigo adelante para ver hasta dónde es capaz de llegar su perpetrador. La de ayer, finalmente, terminó sin haber empezado.

Cuando comienzo un relato, llevo mucho cuidado con esto, con empezarlo. De hecho, me preocupa más comenzarlo que terminarlo, pues la experiencia dice que si logro un principio conseguiré un final. De todos modos, la tentación de llenar páginas y páginas sin comenzarlo es grande. Se lo comento a mi psicoanalista: “Ayer vi en la tele una película que terminó sin empezar”. “¿Y eso qué le sugiere?”, me pregunta. “No sé qué me sugiere”, digo yo, “me irrita, pero al mismo tiempo me da envidia porque muchas de estas películas son las más valoradas por la crítica. Con frecuencia, siento ganas de llamar al crítico y gritarle: ¿Pero no te das cuenta de que sólo has visto un ejercicio de dedos?”.

La terapeuta permanece en silencio unos segundos. Luego dice que los ejercicios de dedos también son interesantes. Por mi parte, opino que los ejercicios de dedos se deben quedar en la trastienda. Entonces, ella me pregunta que desde cuándo acudo a su consulta. “Desde hace varios años”, respondo. “¿Y cree”, insiste, “que ha comenzado de verdad su análisis o que sigue haciendo ejercicios de dedos, como en los primeros días?”.

Cuando un tema da mucho que hablar, lee todo lo que haya que decir.
Suscríbete aquí

He ahí un golpe bajo. El mes pasado le propuse que lo termináramos y, tras discutirlo durante dos o tres sesiones, llegué a la conclusión de que ni siquiera lo había comenzado. Aunque, para decirlo todo, los ejercicios de dedos no van nada mal. De modo que, cuando llego a casa, busco la película de ayer para volver a verla. A ver qué pasa.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Juan José Millás
Escritor y periodista (1946). Su obra, traducida a 25 idiomas, ha obtenido, entre otros, el Premio Nadal, el Planeta y el Nacional de Narrativa, además del Miguel Delibes de periodismo. Destacan sus novelas El desorden de tu nombre, El mundo o Que nadie duerma. Colaborador de diversos medios escritos y del programa A vivir, de la Cadena SER.

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_