¿Orgulloso de España?
Rafael es un joven de 29 años, técnico superior en Imagen, Sonido e Iluminación. Ha encadenado tres contratos temporales, de seis meses cada uno. Cobraba el subsidio cuando se decretó el estado de alarma. Se le terminó en mayo. Solicitó prorrogarlo, se lo denegaron. Solicitó el ingreso mínimo vital, no ha tenido contestación. No encontró trabajo. Tuvo que abandonar el piso de alquiler. Vive en casa de sus padres desde junio. Actualmente sigue en paro. Sin subsidio alguno que le permita emanciparse de nuevo. Busca desesperadamente trabajo. ¿Puede sentirse orgulloso de vivir en España? El suyo no es un caso aislado.
Juan Pedraza Maya. Madrid
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