Macron viajará “en los próximos días” a Mayotte, devastada por el ciclón ‘Chido’

Desolación y caos son las palabras que más se repiten para describir la situación en Mayotte, el archipiélago francés devastado por el ciclón tropical Chido. El presidente de Francia, Emmanuel Macron, ha anunciado este lunes que viajará al pequeño territorio del océano Índico “en los próximos días”. El objetivo, según ha dicho en la red social X, es apoyar a “nuestros conciudadanos, funcionarios y servicios de emergencia” ante esta tragedia. El jefe de Estado también declarará una jornada de luto nacional por la magnitud de la catástrofe. Las autoridades no han podido dar un balance del número de víctimas, pero el prefecto de las islas, François-Xavier Bieuville, había dicho que podría haber “varios cientos” o “miles” de muertos.

Harán falta “días y días” para conocer el balance exacto de víctimas, ha lamentado el ministro del Interior en funciones, Bruno Retailleau, antes de una reunión de crisis presidida por Macron. A la cita participó también el recién elegido primer ministro, François Bayrou, aunque lo ha hecho de manera telemática desde la ciudad de Pau, de la que es alcalde. El jefe del Gobierno ha llamado a la “solidaridad nacional” ante la situación de emergencia que vive el territorio insular. Retailleau, por su parte, ha subrayado que las prioridades son el envío de comida y agua en este departamento de ultramar francés, el más pobre del país.

Las imágenes grabadas en el archipiélago muestran escenas apocalípticas, con barrios enteros arrasados, carreteras colapsadas por los escombros y edificios destrozados. La ministra de Salud, Geneviève Darrieussecq, ha insistido en la necesidad de “reforzar” el único hospital de la isla, que ha sufrido importantes inundaciones. El archipiélago Mayotte, situado frente a la costa de Mozambique, es el departamento más pobre de Francia. Un 77% de su población, de 320.000 habitantes y en torno a la mitad de ellos inmigrantes irregulares, vive bajo el umbral de la pobreza. Al menos un tercio de los que residen en las islas viven en chabolas, que localmente se conocen como bangas. Estas viviendas han sido “completamente destruidas”, ha informado Retailleau. El territorio, de 374 kilómetros cuadrados, sufre también importantes problemas de inseguridad.

“La gente tiene hambre y sed”

El ciclón Chido, con ráfagas que superaron los 220 kilómetros por hora el fin de semana, es el más intenso en golpear este territorio en más de 90 años, ha indicado Météo-France, el servicio oficial de información meteorológica del país. Las autoridades francesas han establecido un puente aéreo y marítimo desde el archipiélago de La Reunión, situado a 1.400 kilómetros, para llevar ayuda de urgencia a las islas. Mayotte está a unos 8.000 kilómetros de París, la capital francesa. El Gobierno enviará hasta 800 efectivos de policía y de salvamento civil, en una carrera contrarreloj para rescatar a las víctimas. La ayuda también incluirá comida y agua.

“Es un paisaje de desolación, Mayotte ha sido decapitada”, ha dicho este lunes Estelle Youssouffa, diputada del grupo centrista LIOT. En una conexión en directo con BFMTV, ha descrito que “ya no queda ni un árbol”, antes de ser interrumpida por la falta de electricidad. Un 85% de la población está actualmente sin corriente, lo que también complica la distribución de combustible. La red telefónica solo funciona al 20% de su capacidad. “Es un caos indescriptible”, ha alertado por su parte en Franceinfo Dhinouraine M’Colo Mainty, primer teniente de alcalde de Mamoudzou, la capital del archipiélago. “La gente tiene hambre y sed”, ha subrayado.

Las autoridades también temen que empeore la situación sanitaria en la isla. “Se trata de una catástrofe dramática, como las que ya hemos visto en Haití y en otros lugares”, ha dicho el presidente de Médicos del Mundo Francia, Jean-François Corty, alertando del riesgo de una nueva epidemia de cólera; la última apenas terminó en julio en el territorio insular.

La Asamblea Nacional, la Cámara baja del Parlamento francés, guardó un minuto de silencio en homenaje a las víctimas del fenómeno. Lo mismo hicieron los diputados del Parlamento Europeo. “Mayotte es Europa y Europa no os abandonará”, declaró la presidenta de la Eurocámara, Roberta Metsola.

El desastre climático se produce en un momento de crisis política en Francia, con un Gobierno que sigue en funciones tras el nombramiento, el viernes, de François Bayrou como nuevo primer ministro. Es la primera crisis a la que se enfrenta desde su elección al frente del Ejecutivo.