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Ucrania asegura que sus tropas ya han disparado contra soldados norcoreanos en la provincia rusa de Kursk

El secretario general de la OTAN advierte que la nueva situación es “una escalada significativa” en la guerra, pero evita concretar si la Alianza Atlántica reforzará su apoyo a Ucrania

Guerra Ucrania
Dos soldados ucranios colocan minas antitanque en un lugar no desvelado cerca de Chasiv Yar, en la región de Donetsk, el pasado 30 de octubre.24TH MECHANIZED BRIGADE PRESS SE (EFE)
Cristian Segura

“Los primeros soldados norcoreanos ya han estado bajo fuego en Kursk”. Con esta escueta frase ha anunciado este lunes Andrii Kovalenko, miembro del Consejo de Seguridad Nacional de Ucrania, que ya se están librando combates entre sus tropas y las de Corea del Norte. Kirilo Budánov, jefe de los servicios de inteligencia del Ministerio de Defensa ucranio (GUR), dio por hecho la semana pasada que en los primeros días de noviembre ya estarían en el campo de batalla parte de los 10.000 militares que Pyongyang ha destinado a Rusia. Ni Kovalenko ni otras fuentes oficiales han aportado más información sobre ello.

Los Gobiernos de Ucrania y de Estados Unidos habían advertido en las dos últimas semanas que el contingente norcoreano estaba siendo preparado para tomar parte en la guerra de forma inminente, en concreto, en la ofensiva del Kremlin para liberar parte de la provincia rusa de Kursk ocupada por Ucrania desde agosto. Fuentes de las Fuerzas Armadas Ucranias en la región de Sumi, la retaguardia en la operación de Kursk, aseguraron el 26 de octubre a EL PAÍS que su artillería ya había disparado contra instalaciones donde se creía que había tropas norcoreanas.

Se trataría de los primeros choques armados con las tropas del dictador Kim Jong-un en Kursk, aunque el GUR ya aseguró que el 3 de octubre fue bombardeado un cuartel en la provincia de Donetsk donde se encontraban ingenieros norcoreanos que supervisaban el uso de munición aportada para la artillería rusa. Pyongyang, según Kiev y el Gobierno surcoreano, supuestamente ha suministrado más de tres millones de proyectiles para los cañones rusos.

El GUR aseguró el 2 de noviembre que 7.000 norcoreanos ya están en Kursk, y que han sido armados con morteros, fusiles de asalto, misiles portátiles antitanque y visores para operaciones nocturnas. Esto indicaría, según el Ministerio de Defensa ucranio, que estos militares no serán destinados a tareas logísticas, sino a misiones de combate.

El diario The Korea Herald publicó el 3 de noviembre que los servicios de inteligencia surcoreanos han detallado en un informe parlamentario que a cambio de la ayuda militar, Corea del Norte recibirá de Rusia hasta 700.000 toneladas de arroz, tecnología para desarrollar satélites, el pago del sueldo de las tropas destinadas en Kursk —2.000 dólares mensuales, según este rotativo— y el compromiso de que las tropas del Kremlin entrarán en combate si Corea del Norte entra en una guerra.

Josep Borrell, jefe de la diplomacia europea, se ha reunido este lunes en Seúl con representantes del Gobierno surcoreano para resaltar la necesidad de una mayor cooperación con Ucrania en defensa. “La agresión rusa contra Ucrania es una amenaza existencial”, ha dicho Borrell tras su encuentro con el ministro de Defensa, Kim Yong-hyun: “Nadie mejor que la República de Corea para entenderlo. Estamos unidos en nuestro apoyo a Ucrania. Les he alentado a aumentar este apoyo”.

“Escalada significativa”

El presidente ucranio, Volodímir Zelenski, reclamó la semana pasada que los aliados occidentales no solo eleven su asistencia militar ante la implicación norcoreana en la invasión, sino que asuman decisiones más valientes porque ahora “es una guerra de dos países contra uno”. La entrada en acción norcoreana en Kursk permitirá a Moscú concentrar más tropas en su avance en la provincia de Donetsk. Zelenski ha insistido en que Estados Unidos y potencias europeas como Alemania le den autorización para utilizar misiles de largo alcance en suelo ruso, algo a lo que la Casa Blanca y el Gobierno alemán se niegan. El jefe de Estado ucranio también ha reclamado que se invite de inmediato a su país a formar parte de la OTAN.

El canciller alemán, Olaf Scholz, ha subrayado este lunes en Berlín, durante una reunión con el secretario general de la OTAN, Mark Rutte, que Rusia “siempre utiliza medios brutales para perseguir sus objetivos imperialistas”. El canciller ha asegurado que Alemania continuará siendo el mayor suministrador europeo de armamento para Ucrania, pero ni él ni Rutte han señalado que vayan a tomarse medidas excepcionales para que Kiev afronte la nueva situación. “Las tropas norcoreanas estacionadas en Rusia son una escalada significativa [del conflicto] y nos hace estar más concentrados y determinados para que Ucrania tenga lo que necesite para luchar contra los rusos, y contra los norcoreanos”, ha dicho el secretario general de la OTAN. “Es importante que Ucrania reciba la ayuda necesaria para afrontar la nueva situación”, ha añadido Scholz.

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Sobre la firma

Cristian Segura
Escribe en EL PAÍS desde 2014. Licenciado en Periodismo y diplomado en Filosofía, ha ejercido su profesión desde 1998. Fue corresponsal del diario 'Avui' en Berlín y en Pekín. Desde 2022 cubre la guerra en Ucrania como enviado especial. Es autor de tres libros de no ficción y de dos novelas. En 2011 recibió el premio Josep Pla de narrativa.
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