La alcaldesa de París trata de retomar impulso político con el éxito de los Juegos Olímpicos
Anne Hidalgo, que en las presidenciales apenas logró un 1,75% de los votos, destaca que la cita deportiva deja un legado que marcará la capital durante 20 años
Durante más de dos semanas, París brilló ante el mundo. Con una ceremonia inaugural en el Sena y escenarios repartidos por toda la ciudad, la capital francesa convirtió los últimos Juegos Olímpicos en un éxito deportivo, organizativo y de fervor popular. La alcaldesa, la socialista Anne Hidalgo, reivindica un legado construido por su equipo y que beneficiará a todos los parisinos. Ante la prensa, se muestra orgullosa y satisfecha de haber dado la vuelta a las numerosas críticas que precedieron el evento. La cita ha sido un momento decisivo de su carrera. La pregunta ahora es en qué medida logrará capitalizar su triunfo. ¿Saldrá o no reforzada? Su mandato termina en 2026, pero aún puede volver a presentarse.
La regidora, que lleva 10 años al mando de la ciudad, ofreció el domingo el relevo de la bandera olímpica a su homóloga de Los Ángeles, Karen Bass, como dicta el protocolo. La ceremonia de clausura, en el Estadio de Francia, puso fin a 17 días de júbilo, en los que todas las críticas quedaron silenciadas o relegadas a un segundo plano. Hidalgo está en una nube. Y advierte que no se trata de un paréntesis. “Es el resultado de 10 años de trabajo, dos quincenas de felicidad y quizá 20 años de legado”, afirmó la política, nacida en San Fernando (Cádiz) en 1959. Era su manera de tratar de apuntarse un tanto y recordar los cambios emprendidos bajo sus dos mandatos.
La capital francesa suele verse como un modelo internacional por sus políticas medioambientales, como la construcción de carriles bici y la creciente peatonalización de sus calles. Pero en el ámbito local, las cosas son distintas. Pese a ser reelegida en el cargo con cerca del 50% de los votos en 2022, Hidalgo produce un gran rechazo en una parte del electorado y del espectro político. Con ella, aseguran, la ciudad se ha vuelto más peligrosa, más sucia y ha perdido población. En las elecciones presidenciales de 2022, a las que se presentó como candidata socialista, apenas logró un 1,75% de los votos.
Con los Juegos, Hidalgo ha querido reivindicarse tras años de críticas. En la rueda de prensa que ofreció al terminar el evento, alabó la proyección internacional de París, pero insistió también en el legado que dejarán las olimpiadas a nivel local. Es “una ciudad que supo transformarse y en la cual los Juegos Olímpicos y Paralímpicos habrán sido un motor y también un acelerador de estas bonitas transformaciones”.
Como ejemplo, citó las nuevas áreas verdes de la ciudad y los cambios destinados a reducir el peso del coche. La peatonalización de los muelles del Sena en 2017 fue la punta de lanza de sus políticas, que encontraron una sonada oposición en su inicio. También mencionó el proceso de saneamiento del río, con 1.400 millones de euros invertidos desde 2016 (la mitad financiados por el Estado) para abrir tres lugares donde la población podrá bañarse de manera segura.
Pero no todos lo ven así. “Por mucho que Hidalgo intente apropiarse del ‘éxito’ de este acontecimiento mundial, le resulta difícil disimular el carácter menor, incluso contraproducente, de su papel”, opina por correo electrónico Aurélien Veron, portavoz del grupo municipal Changer Paris [Cambiar París, que agrupa a la derecha de Los Republicanos (LR), centristas e independientes]. El político local menciona el hecho de que la alcaldesa haya “criticado al Estado y a la región por su supuesta incompetencia”.
En noviembre, la regidora dijo en un plató que tanto los transportes —responsabilidad de la presidenta de la región Île-de-France, Valérie Pécresse (LR)—, como las soluciones para albergar a las personas sin techo no estarían listas para el megaevento. Sus declaraciones provocaron una ola de indignación y acusaciones por parte de la oposición y del campo presidencial de politizar la cita deportiva. Para el resto, dijo Hidalgo, “estaremos listos”, incluido el baño en el Sena.
Celebrar competiciones deportivas en sus aguas era una de las principales promesas de la alcaldesa, que hizo del saneamiento del río una de sus grandes líneas políticas. Hidalgo nadó en el verdoso Sena para demostrar que estaba limpio justo antes de los Juegos. Durante el evento, algunas pruebas y entrenamientos tuvieron que ser aplazados por niveles de bacterias fecales superiores a los recomendados. Pero la imagen de la edil bañándose en el Sena no podía faltar. Su zambullida se convirtió en un acto político con una gran cobertura mediática. La corresponsal de CNN se dio incluso su chapuzón al mismo tiempo para un directo.
Unos días antes y por separado, lo hizo la ministra de Deportes, Amélie Oudéa-Castera, con quien las relaciones, al igual que con el presidente Emmanuel Macron, son complicadas. El mandatario nombró en enero a la conservadora Rachida Dati, principal opositora de Hidalgo en París, como ministra de Cultura, que a los pocos días confirmó que mantenía sus ambiciones de presentarse a las municipales de la capital en 2026. Según un sondeo de Ifop, publicado en abril, antes de los Juegos, en caso de segunda vuelta entre Dati e Hidalgo en, ganaría la primera con un 59%. Pero para esa cita electoral aún faltan dos años.
“Revancha política”
La cita olímpica ha sido una prueba de fuego. Todo podía salir mal, pero al final salió bien. Antes de su inauguración, los Juegos generaban tanto indiferencia como sentimientos negativos entre la población. Pero su éxito, pese a todo, ha reforzado el perfil de la regidora. “Anne Hidalgo sale incontestablemente reimpulsada por esta enorme secuencia publicitaria a escala mundial para la ciudad”, escribió el diario Le Monde cuando la entrevistó el 6 de agosto. Le Parisien habla de “revancha política” de la socialista de origen español.
Veron, el portavoz del grupo Changer Paris, cree, sin embargo, que “como en el caso de Cenicienta, el carruaje corre el riesgo de volver a convertirse en calabaza después de la duodécima campanada de medianoche cuando la policía y los gendarmes regresen a sus zonas de origen y los prodigiosos recursos desplegados por el Estado y la Región de Île-de-France vuelvan a su nivel habitual”.
“Durante los dos últimos años, hemos oído muchas cosas negativas, han cuestionado y dudado de la capacidad de éxito, de la capacidad de innovación, del deber de adaptarnos (…)”, criticó ante la prensa Pierre Rabadan, responsable de los Juegos en el Ayuntamiento. Para Hidalgo, lo que se vio en las últimas semanas “no es nada” comparado con lo que se verá en los Paralímpicos. A la pregunta de si se presentará a un tercer mandato en 2026, prefiere no contestar. Por ahora.
Sigue toda la información internacional en Facebook y X, o en nuestra newsletter semanal.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.