El juicio contra Bolsonaro queda suspendido con un 3-1 a favor de inhabilitarlo y se reanuda el viernes
El destino político del expresidente de Brasil está en manos de los tres jueces del tribunal que quedan por votar
Más de 10.000 personas seguían este jueves a primera hora en directo el juicio contra el líder de la derecha brasileña y expresidente, el ultra Jair Bolsonaro, por abuso de poder en el canal oficial del Tribunal Superior Electoral (TSE). La vista, a la que el acusado no asiste, ha sido suspendida esta tarde y será retomada este viernes a mediodía. Hasta ahora, han emitido su voto cuatro de los siete magistrados que integran el tribunal. Los enganchados a la política brasileña lo siguen como si fuera un partido. Concluida la sesión de hoy, el resultado está en 3-1 a favor de inhabilitar a Bolsonaro, lo que le apartaría de las elecciones hasta 2030. Incluso el acusado ha admitido que lo más probable es que el caso termine en condena.
La acusación de abuso de poder viene de una reunión que Bolsonaro convocó en Brasilia, tres meses antes de las elecciones pasadas, con el cuerpo diplomático. Ante decenas de diplomáticos extranjeros, el entonces jefe del Estado brasileño arremetió contra el proceso electoral y puso en duda, sin ofrecer pruebas, las garantías para que la votación y el recuento fueran limpios.
Bolsonaro, que tiene pavor a acabar en la prisión, en este caso no se arriesga a ser encarcelado, aunque afronta otras acusaciones que sí contemplan ese castigo. Este es el primer caso en que una de las investigaciones contra él llega a juicio. La pena son ocho años de inhabilitación para concurrir a las elecciones. Si es condenado puede recurrir ante el tribunal electoral o ante el Tribunal Supremo.El propio ultraderechista ha recordado esta mañana que, en caso de que los jueces cercenen su carrera electoral, el Congreso podría amnistiarle. “La amnistía está prevista en el régimen democrático y es el Parlamento quien decide”, ha declarado.
Junto a él es juzgado bajo la misma acusación el que fuera su candidato vicepresidente en las elecciones del pasado octubre, el general retirado Walter Braga Netto. Cuatro jueces han votado hasta ahora y los cuatro son partidarios de absolverlo.
Con un voto más a favor de la condena de Bolsonaro habría mayoría para inhabilitarlo. Y ese es el escenario más probable mañana viernes en cuanto empiece la vista y vote la siguiente togada. Pero el expresidente ultraderechista y los suyos aún confían en que uno de los jueces, designado para el cargo por él mismo, pida una pausa para analizar con más detalle la documentación y los argumentos antes de emitir su veredicto. Este tipo de pausas, frecuentes en las altas cortes de Brasil, son de una duración imprevisible. Pueden ser semanas, meses o en ocasiones años.
A la sesión de este jueves llegaban los magistrados con el primer y contundente voto a favor del juez instructor, emitido el martes poco antes de la medianoche. Tras su veredicto, la sesión fue aplazada hasta esta mañana. Y este jueves, al ser retomada, el primer voto emitido ha sido a favor de la absolución del expresidente. Este magistrado ha alegado, informa Efe, de que los tribunales deben tener “una intervención de mínima” en el proceso electoral y que el tribunal electoral no fue creado para “despojar mandatos”. En este momento, Bolsonaro es solo líder de la oposición, no tiene escaño. Perdió la inmunidad el día que Luiz Inácio Lula da Silva asumió el poder.Otros dos jueces han votado después a favor de que sea excluido de las próximas carreras electorales. El destino político de Bolsonaro está en manos de los tres jueces que quedan por votar.
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