El alcalde de Kiev: “Cuando el último soldado ruso abandone el territorio ucranio, estaremos listos para hablar sobre una solución”
Vitali Klitschko visita Barcelona y se ve obligado a regresar por el ataque ruso con misiles a su ciudad
Cuatro ideas ha lanzado este martes el alcalde de Kiev, Vitali Klitschko, en su segunda visita a Barcelona en solo dos meses. El viaje coincidió con la intervención del presidente Volodímir Zelenski, ante el G-20 y con el bombardeo que a partir de mediodía afectó a varios edificios de Kiev. Klitschko destacó varias cuestiones. Una, no hay nada que hablar con Rusia hasta que “el último soldado abandone el territorio ucranio”. Dos, el ataque por parte de Putin a infraestructuras energéticas es “un genocidio” que “no respeta las reglas internacionales de la guerra”, como no atacar a la población civil. Tres, están preparados para la guerra del frío. Y cuatro, la Unión Europea se juega su futuro en esta invasión. Además de la necesidad de informar sobre el conflicto: “Los medios hoy en día son mucho más importantes que los tanques, aviones o balas, son el arma principal”.
Si en septiembre Klitschko visitó Barcelona porque Kiev será la ciudad invitada en la fiesta mayor de 2023, ahora lo ha hecho para participar en el Smart City Expo, un salón de tecnología aplicada a las ciudades y su movilidad. Por la mañana, explicó en Fira de Barcelona la digitalización de su ciudad a partir de 2015 y cómo la aplicación para móviles de Kiev está resultando útil durante la invasión de Rusia. “La tecnología salva vidas”, aseguró sobre funcionalidades como los avisos para ir a los refugios o consultar mapas actualizados. Repitió la idea de que la invasión rusa es “un genocidio” y aseguró que el 40% de las infraestructuras energéticas críticas han sido dañadas a las puertas del invierno, cuando las temperaturas alcanzan los 30 grados bajo cero.
A mediodía, el alcalde de Kiev mantuvo un encuentro privado con la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau. A continuación tenía entrevistas con varios medios de comunicación. A mitad de la primera, recibió el aviso de que su ciudad estaba siendo atacada con misiles. En la pomposidad del principal salón del Ayuntamiento, Klitschko —dos metros de altura, fisonomía que delata que fue boxeador y mangas de camisa—, su jefa de gabinete y otros acompañantes hablaban por teléfono con caras muy serias, pero en voz baja.
Las entrevistas derivaron en un breve encuentro, durante el que el alcalde estuvo pendiente de la pantalla de su móvil y fue de nuevo interrumpido con una llamada. “Lo siento, no tengo más tiempo. Tengo que volar de regreso a Ucrania”, se disculpó al inicio tras informar de que el ataque con misiles había afectado edificios de viviendas con varias víctimas, y aunque en ese momento desconocía la cifra exacta de muertos y heridos. Pese a la tensión, no perdió la calma ni levantó la voz.
Preguntado por las voces de la UE y del Pentágono sobre la necesidad de negociar con Rusia y si los líderes ucranios estarían dispuestos sin la retirada de soldados rusos del territorio del país, respondió: “Cuando el último soldado ruso abandone el territorio ucranio, estaremos listos para hablar sobre una solución. Ahora mismo, no veo la razón para hablar con ellos y encontrar algún compromiso, mientras ocupan Ucrania”. Sobre el caso de la península Crimea, anexionada ilegalmente por Rusia en 2014, señaló: “Crimea siempre fue Ucrania. Nadie en el mundo acepta que sea parte de Rusia”. “Los rusos van tan lejos como pueden, es el objetivo, no Crimea. El objetivo es Kiev, capital de Ucrania. Putin habla de eso en abierto para reconstruir el imperio soviético”, dijo. “La unidad con Ucrania es la clave para la paz en Europa”, añadió.
También aseguró que a Rusia la guerra no le va bien: “Putin no tiene éxito en el campo de batalla, por eso intenta hacer chantaje disparando misiles a civiles, tratando de deprimir a la gente, no tenemos depresión. Estamos cabreados y listos para luchar y defender nuestras casas”.
Respecto la posible guerra del frío y si puede generar una nueva oleada de refugiados al oeste del país o hacia países de la Unión Europea, o si tienen planes para evacuar Kiev, el alcalde aseguró: “Calculamos cualquier escenario y también el peor de los casos. Y tenemos que estar preparados para cada caso y esperamos que no suceda. Estar preparado es muy importante…”. En ese momento volvieron a interrumpirle. “Perdónenme”. Un minuto de silencio que dejaba oír hasta una máquina de refrigeración. Y luego: “Han matado a personas de nuestra ciudad por un ataque con misiles. Trataré de volar cuanto antes. Es importante. Un par de preguntas más y tengo que irme”.
El alcalde terminó agradeciendo la atención y la importancia de ser escuchados. “No queremos rendirnos. Luchamos por el futuro de nuestros hijos. Estamos motivados y esta guerra la ganaremos. Preguntan ¿cuánto durará esta guerra sin sentido? Quedarse con Ucrania es clave para la paz y la libertad y para la estabilidad de Europa”. Y otro aviso: “Los rusos van tan lejos como se les permite ir”.
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