Un millón de refugiados huyen de la guerra en Ucrania en una semana: los datos del éxodo
El conflicto ha desplazado a más de un millón de personas y provoca largas colas en estaciones y puestos fronterizos
Cada punto
representa
300 personas
POLONIA
649.903
UCRANIA
ESLOVAQUIA
90.329
HUNGRÍA
144.738
MOLDAVIA
103.254
RUMANIA
57.192
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La madrugada del 24 de febrero, las tropas rusas cruzaron la frontera de Ucrania. Al día siguiente, 80.000 ciudadanos del país habían dejado sus casas para buscar refugio en los países vecinos, según datos del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR). Una semana más tarde, el número asciende a 1.200.000 ucranios desplazados por la guerra, la mayoría mujeres y niños. Solo el martes salieron del país más de 190.000 personas, 6.000 cada hora.
La mitad de estos refugiados han cruzado las fronteras hacia Polonia, donde ya reside una amplia comunidad de ucranios. Otros 144.000 han llegado a Hungría y el resto se reparten por otros países.
Pero esto es solo el principio. Según ACNUR, hasta cuatro millones de personas podrían dejar Ucrania. La Comisión Europea, que cifraba en siete millones los posibles refugiados por el conflicto, se prepara para gestionar una crisis sin precedentes.
Estaciones y controles fronterizos abarrotados
El transporte por tierra se ha convertido en la principal vía de escape desde que se cerró el espacio aéreo con el comienzo de la invasión.
Antes del conflicto, salían de Ucrania más de medio centenar de trenes en dirección a destinos internacionales. En condiciones normales, por los más de 22.000 kilómetros de vías férreas de la exrepública soviética se mueve un 37,5% del tráfico de los pasajeros del país.
Ukrzaliznytsia, la empresa que gestiona esta infraestructura, pidió el miércoles el establecimiento de un corredor humanitario seguro para continuar con la evacuación de civiles. De acuerdo con los mapas en que la entidad recoge el estado de la red, al menos dos estaciones han sufrido daños en el transcurso del conflicto y más de 20 están fuera de servicio.
La terminal de Lviv, en el oeste del país, es la segunda más ajetreada después de Kiev. De esta parada, situada a unas seis horas en tren de la capital y a casi 14 horas de Járkov, salen 55 rutas diferentes hacia otras ciudades importantes del país. Es también un nodo internacional hacia Polonia o Alemania o hacia Eslovaquia y Hungría a través de la ciudad fronteriza de Úzhgorod.
Colas en el interior de la estación de Kiev, 28 de Febrero. Vadim Ghirda/AP.
Esperas en un andén de la estación de Lviv, 27 de febrero. Bernat Armangue/AP.
Llegada a una estación de Varsovia, Polonia, 26 de febrero. Albert Zawada/EFE.
Llegada a una estación de Budapest, Hungría. 1 de marzo. Janos Kummer/Getty Images.
Quienes han dejado su país por carretera pintaban hasta el jueves un reguero de vías congestionadas a la salida de las áreas metropolitanas y de camino a los puestos fronterizos. Así lo reflejaban hasta el lunes los datos de tráfico de Google, que desde entonces ha dejado de publicar esta información en Ucrania ante la preocupación por cómo podrían utilizarla las tropas rusas.
En condiciones normales, el trayecto en coche desde Kiev hasta Polonia se completaría en unas 10 horas. Ahora, tan solo cruzar la frontera puede implicar una espera adicional de 60 horas, según detalló el martes Shabia Mantoo, portavoz de ACNUR. No en vano, entre el lunes y el martes pasaron más de 100.000 personas de un país al otro, según las autoridades polacas. Las colas para llegar a Rumania superaban los 20 kilómetros, y recorrer los 60 kilómetros que separan Moldavia de la capital ucrania podía costar 24 horas, de acuerdo con las estimaciones de ACNUR.
Cruce fronterizo de
Vylok-Tiszabecs
Martes 1 de marzo
UCRANIA
Vylok
Tisza
Control
fronterizo
HUNGRÍA
Tiszabecsi
200 m
Norte
Una caravana de vehículos, de más de 700 metros de largo, espera para cruzar la frontera de Ucrania a Hungría.
De los cientos de refugiados reunidos en esta localidad del este de Hungría, la mayoría son mujeres y niños que dejaron atrás a sus maridos, padres, hermanos e hijos para luchar en la resistencia de Ucrania.
Imagen satelital: Planet Labs PBC, vía AP.
Cruce fronterizo de
Vylok-Tiszabecs
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Norte
Una caravana de vehículos, de más de 700 metros de largo, espera para cruzar la frontera de Ucrania a Hungría.
De los cientos de refugiados reunidos en esta localidad del este de Hungría, la mayoría son mujeres y niños que dejaron atrás a sus maridos, padres, hermanos e hijos para luchar en la resistencia de Ucrania.
Imagen satelital: Planet Labs PBC, vía AP.
Cruce fronterizo de Vylok-Tiszabecs
Martes 1 de marzo
UCRANIA
Vylok
Tisza
Control
fronterizo
Control
fronterizo
HUNGRÍA
Tiszabecsi
200 m
Norte
Una caravana de vehículos, de más de 700 metros de largo, espera para cruzar la frontera de Ucrania a Hungría.
De los cientos de refugiados reunidos en esta localidad del este de Hungría, la mayoría son mujeres y niños que dejaron atrás a sus maridos, padres, hermanos e hijos para luchar en la resistencia de Ucrania.
Imagen satelital: Planet Labs PBC, vía AP.
Este difícil éxodo ocurre además en los meses más fríos del año, con temperaturas que en Kiev oscilan entre -1 y -6 grados centígrados, y con el obstáculo añadido de los controles en los puestos fronterizos, cuyos guardas intentan asegurar que los hombres de entre 18 y 60 años que puedan ser reclutados permanecen en el país.
Un reto para la Unión Europea
La crisis de Crimea, en 2014, obligó a dejar sus hogares a casi cuatro millones de personas en un país de 44 millones. Un año después, 1,6 millones de personas habían huido de la región, principalmente a otras zonas del país en control del Gobierno. Entonces el conflicto solo afectó a una región, pero ahora la invasión rusa es probable que alcance más zonas del territorio, obligando a los refugiados a huir hacia fuera.
ACNUR apunta que hasta 1,5 millones de desplazados podrían acabar en Polonia, donde la comunidad ucrania ya es la más numerosa. En 2019 vivían allí cerca de 1,4 millones de compatriotas, según contabilizaba el Gobierno polaco. También son la nacionalidad extranjera más importante en República Checa (162.000) y en Lituania (27.000), según Eurostat. En España hay censadas unas 107.000 personas con ciudadanía ucrania, el 60% repartidos entre Madrid, Cataluña y la Comunidad Valenciana.
En el contexto actual, diferentes países europeos están simplificando sus procedimientos para recibir a los refugiados ucranios en respuesta a la decisión de la UE de activar una directiva para la acogida ilimitada y la concesión permisos temporales de residencia. Además de facilitarles el acceso, la norma contempla que los desplazados cuenten con un alojamiento adecuado.
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