La batalla del arcoíris se libra en París

Debían ser símbolos de bienvenida a la comunidad LGTBI en París, pero se han convertido en pocos días en un recordatorio de la homofobia que persiste en la sociedad gala: las bandas con los colores del arcoíris pintadas en varios pasos de cebra del centro de la capital francesa con motivo del desfile por el Día Internacional del Orgullo LGTB este sábado han sido vandalizadas varias veces en apenas unos días. La alcaldesa, Anne Hidalgo, ha anunciado que emprenderá acciones legales y ha lanzado un órdago a los homófobos: los arcoíris han llegado a la ciudad de la luz para quedarse, aunque haya que pintarlos una y otra vez.

El primer boicot homófobo se produjo durante la noche del lunes al martes. Los arcoíris pintados a los costados de los pasos de cebra del cruce de la Rue des Archives, en el céntrico y turístico barrio de Marais, aparecieron tapados con pintura blanca y, en medio de la calle, un mensaje explícito: “LGTB, fuera de Francia”. La alcaldesa afirmó que esa muestra de “sucia homofobia” revela hasta qué punto es necesaria la Marcha del Orgullo, como se denomina en Francia el desfile del sábado, y anunció en un tuit con la etiqueta #LoveWins (el amor triunfa) que denunciaría el caso ante el fiscal de la República.

Pero París no ha sido la única víctima. Una escalinata en Nantes decorada también con los colores del arcoíris fue vandalizada con pintura blanca la semana pasada, mientras que un local LGTB de Angers apareció con pinturas homófobas, según Le Monde.

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Varias asociaciones LGTB emitieron un comunicado conjunto denunciando los “mensajes de incitación al odio” contra su comunidad. “Para aquellos que creían que, cinco años después de haber conquistado el derecho al matrimonio para todos y todas ya no era necesario desfilar o continuar el combate por la igualdad, estas nuevas degradaciones constituyen un desmentido contundente”, afirmaron.

Los servicios de limpieza restauraron rápidamente los arcoíris parisinos en todo su esplendor que ya habían empezado a volver a colorear algunos voluntarios. El Ayuntamiento anunció además la creación de otros “pasos arcoíris” suplementarios y, además, decidió que estos permanecerán pintados en las calles del Marais pasado el Orgullo, igual que en algunas partes de Madrid fueron instalados el año pasado con carácter permanente semáforos inclusivos con figuras de dos mujeres o dos hombres. “París es una ciudad de refugio que hace suyos los valores republicanos de libertad, igualdad y fraternidad. Para que se inscriban para siempre en sus muros, los pasos de peatones con arcoíris creados para la Marcha del Orgullo serán permanentes”, afirmó la alcaldesa en un mensaje en las redes sociales. La Asamblea Nacional se ha unido a las celebraciones con la instalación —esta vez temporal— de gigantescas banderas arcoíris en su fachada.

Pero la alegría ha durado poco. Este viernes, varios pasos de cebra con el arcoíris volvieron a aparecer vandalizados. En esta ocasión, se había escrito con pintura negra sobre su trazado lemas como “dictadura LGTB” o “Hidalgo, lárgate”. La alcaldesa ha afirmado que “esta homofobia no quedará impune” y ha vuelto a activar a las autoridades judiciales. Los pasos han vuelto a ser restaurados. La batalla arcoíris continúa.

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