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Casi 60 muertos y más de 500 heridos en la mayor masacre a tiros de Estados Unidos

Un solo asesino disparó varias ráfagas desde un hotel de Las Vegas contra una multitud de miles de personas que asistían a un concierto en la calle

Asistentes al concierto en Las Vegas corren para ponerse a salvo al oírse los tiros. En vídeo, el momento del tiroteo, la evacuación y el despliegue policial.Vídeo: AFP / VIDEO: REUTERS-QUALITY
Pablo Ximénez de Sandoval
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Estados Unidos despertó este lunes ante la mayor masacre a tiros de su historia. Un solo sospechoso, desde un piso 32 de un hotel de Las Vegas (Nevada), mató al menos a 59 personas y dejó más de 500 heridos antes de suicidarse cercado por la policía. Lo hizo a tiros, con armas automáticas, disparando contra una masa de unas 22.000 personas que asistían a un concierto al aire libre a unos pocos cientos de metros de distancia.

Doce horas después de la masacre, los investigadores aún no tenían pistas sobre los motivos. El autodenominado Estado Islámico ha asumido la autoría del ataque, algo que las autoridades han acogido con escepticismo. Además la policía ha localizado en una casa propiedad del atacante armas de fuego, explosivos y munición.

El autor de la matanza fue identificado como Stephen Paddock, un hombre blanco de 64 años vecino de Mesquite (Nevada), 130 kilómetros al noreste de Las Vegas. Paddock se suicidó justo antes de que entraran los agentes en su habitación, según ha informado el sheriff del condado Clark, en el que se encuentra Las Vegas. El jefe de la Policía de Nevada, Joseph Lombardo, dijo que cree que se trata de un "lobo solitario". El supuesto asesino guardaba diez pistolas y varias armas largas en la habitación desde la que efectuó los tiros, según ha indicado el oficial Kevin McMahill. Paddock, que carecía de antecedentes penales graves, llevaba alojado en esa habitación de hotel desde el 28 de septiembre.

David Alameda

No duró mucho. Menos de un minuto. Miles de personas asistían el domingo por la noche al último concierto de un festival country llamado Route 91. Jason Aldean había salido al escenario y comenzaba su actuación. A las 22.08 locales (5.00 del lunes en España), según la policía de Las Vegas, se empezaron a escuchar disparos. Varios vídeos compartidos en redes sociales muestran a la banda en el escenario confundida. Varios testigos dijeron que parecían “fuegos artificiales”. Entonces, cesó la música. Y en los vídeos se escucha con claridad: ta, ta, ta, ta, ta. Ráfagas automáticas sobre la multitud, a bulto, provenientes de lo alto del casino Mandalay Bay. La gente empezó a correr presa del pánico.

La dimensión de la tragedia fue evidente desde los primeros momentos. Primero, el hospital universitario de Las Vegas informó de “múltiples” heridos de bala que habían llegado a sus instalaciones. A medianoche, había dos muertos confirmados. Dos horas después, eran más de 20. En seguida, más de 50 y más de 400 heridos. La matanza es tan grande que 12 horas después de los disparos la policía todavía tenía que dar cifras así, por decenas y centenares, a grandes rasgos.

El Estado Islámico (ISIS, en inglés) se ha atribuido la autoría del ataque a través de un comunicado de la agencia Amaq, uno de los órganos de propaganda de los yihadistas. "El atacante es uno de nuestros soldados, que se convirtió al islam hace unos meses", afirman. "No existe hasta ahora ningún vínculo conocido entre el tirador y ningún grupo extranjero conocido", señaló un portavoz del FBI durante una rueda de prensa celebrada en la ciudad. Su nombre no está en ninguna base de datos de sospechosos de terrorismo. El que el ISIS asuma un tiroteo no implica necesariamente que lo haya organizado, haya participado en los preparativos o en la ejecución.

Las investigaciones policiales de los atentados perpetrados en Europa en los últimos años y asumidos por el ISIS confirmaron vínculos operativos del grupo yihadista con los terroristas en varios casos incluidos los ataques más graves, los de Bataclan, con 130 muertos, y Bruselas, con 32 fallecidos. En la mayoría de los atentados, el ISIS ha servido de inspiración.

La Policía de Las Vegas investigaba en un primer momento una habitación del piso 32 del hotel Mandalay Bay. Sobre la medianoche local, la cuenta de Twitter de la Policía confirmó que "un sospechoso ha sido abatido" y advertía: "Esta es una situación activa".

En esos momentos de tensión y caos, se podía oír a los agentes en la radio de la policía atendiendo informaciones sin contrastar sobre posibles tiroteos en otros hoteles, como el Tropicana y el New York. La ciudad entera estuvo colapsada durante horas, con las calles cortadas al tráfico y bajo alerta táctica hasta que pasadas las dos de la madrugada la policía concluyó que el tirador había actuado solo.

Una mujer herida es trasladada al hospital después del tiroteo.
Una mujer herida es trasladada al hospital después del tiroteo.Chase Stevens (AP)

Uno de los fallecidos es un agente de la Policía de Las Vegas que estaba fuera de servicio, mientras que dos compañeros suyos que sí estaban trabajando resultaron heridos. Los agentes piden "paciencia" a los ciudadanos porque "el proceso de identificación de los heridos y muertos tomará tiempo".

El sur de la calle principal de Las Vegas, el llamado Strip, se encontraba cerrado el lunes por la mañana creando importantes complicaciones de tráfico. También algunas salidas de la autopista 15, que recorre la ciudad de norte a sur, estaban cerradas. La posibilidad de que hubiera más tiradores hizo que se cerrara durante unas horas el aeropuerto de McCarran, cerca del Mandalay Bay. Acercarse al lugar de los hechos era imposible. Mientras, en el hospital Universitario de Las Vegas cientos de personas hacían cola para donar sangre respondiendo a la llamada de las autoridades.

La anterior masacre de un calibre similar fue la perpetrada en junio del año pasado, también por un solo asesino con armas de asalto, en la discoteca Pulse, en Orlando, Florida. Murieron 50 personas, ejecutadas una a una a sangre fría durante horas de asedio. Pulse era una discoteca de ambiente gay. Ese dato dio pistas sobre la motivación del asesino desde el primer momento. En el caso de Las Vegas, el origen de la locura seguía siendo un misterio.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dio sus condolencias a las víctimas a primera hora de la mañana. "Mis más cálidas condolencias y simpatías a las víctimas y las familias del terrible tiroteo de Las Vegas. ¡Que Dios los bendiga!", escribió en un tuit. Políticos de Estados Unidos y otras partes del mundo dieron igualmente sus condolencias a las víctimas, entre ellos el vicepresidente Mike Pence. Trump calificó el suceso como "un acto de pura maldad", en una rueda de prensa. El miércoles se desplazará a Las Vegas, tras visitar el martes Puerto Rico para evaluar los daños del huracán María en la isla.

Se calcula que cada año en Estados Unidos mueren unas 33.000 personas por disparos de armas de fuego, lo que equivale a unas 93 al día.

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Sobre la firma

Pablo Ximénez de Sandoval
Es editorialista de la sección de Opinión. Trabaja en EL PAÍS desde el año 2000 y ha desarrollado su carrera en Nacional e Internacional. En 2014, inauguró la corresponsalía en Los Ángeles, California, que ocupó hasta diciembre de 2020. Es de Madrid y es licenciado en Ciencias Políticas por la Universidad Complutense.

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