Fernando Ocáriz, nuevo prelado del Opus Dei

A última hora de la tarde del pasado lunes, el papa Francisco nombró prelado del Opus Dei a Monseñor Fernando Ocáriz Braña (París,1944), hasta ese momento vicario auxiliar de la Obra. Su nombramiento, elegido en una veloz votación secreta, marca una clara continuidad en la línea que mantenía Monseñor Javier Echevarría, fallecido el 12 de diciembre y que ocupó el cargo durante 22 años. Sin embargo, por cuestiones cronológicas, representa también la llegada de la cuarta generación de dirigentes, siendo el primer prelado que no ha trabajado directamente con el fundador del Opus Dei, José María Escrivá de Balaguer. Ocáriz se convierte en la máxima autoridad de la organización, que actualmente asegura tener unos 90.000 seguidores distribuidos en más de 60 países, y que mantiene todavía a un tercio de ellos en España.

La figura del prelado tiene una gran relevancia en la Iglesia católica. Juan Pablo II convirtió al Opus Dei, hasta entonces un instituto secular, en una Prelatura personal única en la Iglesia. Eso, entre otras cosas, significa que la Obra no está bajo la autoridad de los obispos y le concede un estatus absolutamente único dentro de la institución. El nombramiento de Ocáriz venía fraguándose desde que en diciembre de 2014, el entonces prelado Javier Echevarría le convirtió en vicario auxiliar, y colocó como vicario general al argentino Mariano Fazio, elección en la que algunos vieron un guiño al nuevo Papa. La decisión ya dibujaba un orden sucesorio en el que desaparecería el influyente arzobispo peruano Juan Luis Cipriani.

Esta tarde, en su primera comparecencia ante los medios , Ocáriz agradeció a Dios y al Papa su nombramiento.Pero ante las preguntas de un periodista alemán sobre los supuestos vículos del Opus Dei con el franquismo y el régimen de Pinochet, se salió un poco más del guion y quiso desmarcar a la obra y a si mismo de tales relaciones. “Personalmente nací en el Exilio. Mi padre era militar republicano, durante la guerra se tuvieron que marchar a Francia. Nunca he sido franquista, más bien al contrario. Aunque cualquiera puede ser lo que quiera, mientras sea compatible con ser católico”.

Ocáriz, tercer responsable de la Prelatura, apasionado jugador de tenis, nació en París en 1944 y, efectivamente, es el más joven de los ochos hijos de un militar republicano exiliado. Es licenciado en Ciencias Físicas por la Universidad de Barcelona (1966) y en Teología por la Pontificia Universidad Lateranense (1969). Obtuvo el doctorado en Teología, en 1971, en la Universidad de Navarra. Ese mismo año fue ordenado sacerdote. En sus primeros años como presbítero se dedicó especialmente a la pastoral juvenil y universitaria. Además, es consultor de la Congregación para la Doctrina de la Fe (desde 1986) y de otros dos organismos de la Curia romana.