Hollande recibe a Renzi en su búsqueda de apoyos contra el ISIS

Italia ha hecho valer su voz en las negociaciones diplomáticas emprendidas por el presidente francés, François Hollande, para sumar apoyos a la coalición contra el ISIS (Estado Islámico). El presidente del Consejo italiano, Matteo Renzi, ha desayunado esta mañana en el palacio del Elíseo con el mandatario francés para expresarle su apoyo e incorporar a Libia en la agenda internacional sobre los refugiados. París y Roma están de acuerdo en buscar un acuerdo global con Turquía que permita a los desplazados sirios quedarse en ese país.

François Hollande, que esta tarde ve al presidente ruso, Vladímir Putin, en Moscú, ha aprovechado la reunión de la mañana para lanzarle un mensaje directo: “Nada sería peor que el hecho de que la comunidad internacional, frente a la amenaza terrorista, no adopte las decisiones que esperan”. El equilibrio que pretende Hollande es complicado. Su posición, como la de Washington, es diametralmente opuesta a la de Moscú, que apoya al presidente sirio Bachar el Asad. “El proceso de transición política siria conducirá a la salida de El Asad”, ha insistido Hollande esta mañana.

El derribo de un caza ruso por parte de Turquía, miembro de la OTAN, el pasado martes, es una evidente amenaza a la coalición global contra el ISIS en Oriente Próximo que Hollande pretende. No obstante, tras los atentados del 13 de noviembre que costaron la vida a 130 personas, París y Moscú han coordinado su ofensiva bélica contra el ISIS en Siria e Irak.

Sobre los refugiados, Hollande ha manifestado el interés compartido con Renzi de buscar también un acuerdo global con Turquía. Tras las declaraciones de Manuel Valls del martes considerando que Europa no puede acoger más desplazados, Hollande ha insistido en que Francia acogerá a 30.000 en los dos próximos años. “Nuestro país tiene el deber de respetar estos compromisos”.

La ofensiva diplomática de Hollande termina el domingo con una cena con el presidente chino Xi Jinping en París. Con tal cita habrá recabado apoyo de los otros cuatro miembros permanentes del Consejo de Seguridad (Estados Unidos, Reino Unido, Rusia y China), más Alemania e Italia.