La bala perdida del Bataclan que pudo matar a Stéphane Hache
El estudio en el que vivía de alquiler daba a la parte trasera de la sala
Stéphane Hache, de 52 años, se encontraba tranquilamente en su casa la noche de los ataques terrorista en París. El estudio en el que vivía de alquiler daba sin embargo a la parte trasera de la sala Bataclan, donde uno de los tres comandos de kamikazes mataron a unas 90 personas. Su cuerpo sin vida fue encontrado durante el fin de semana, alcanzado posiblemente por una bala perdida, según informa el diario local Ouest France, que indica que tenía la ventana abierta.
Sus familiares, que viven en Sables d’Olonne, alertaron a la policía el sábado, al no tener noticias suyas y dada la situación de la víspera, según añade L’Express. La policía finalmente entró su piso “durante el fin de semana” y allí encontró su cuerpo sin vida.
Hache trabajaba en la hostelería y había desarrollado el grueso de su carrera en la capital parisina, aunque durante el verano había trabajado en el hotel Mercure Côte-Ouest de Sables d’Olonne, en el oeste, donde viven sus padres. “Era un hombre muy profesional, deja un vacío”, indicó a L’Express una antigua compañera de trabajo. “Todos los equipos están desestabilizados, conmocionados. Era un hombre encantador con mucha clase, un gran profesional, que ha dejado su huella”, concluyó.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.