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Duelo estelar en Hénin-Beaumont: Mélenchon contra Le Pen

El jefe del Frente de Izquierdas y la líder del Frente Nacional se medirán en las legislativas

Marine Le Pen, en una rueda de prensa hoy.
Marine Le Pen, en una rueda de prensa hoy.RAYMOND ROIG (AFP)

Jean-Luc Mélenchon, jefe de filas del Frente de Izquierda, ha anunciado que será candidato en las legislativas de junio por Hénin-Beaumont, la undécima circunscripción de Pas-de-Calais, y ha dado así carácter oficial a su duelo con Marine Le Pen, la presidenta del Frente Nacional, que tiene su feudo electoral en esta ciudad norteña azotada por la crisis y el paro.

Mélenchon y Le Pen se odian sin la menor cordialidad, y durante la campaña de las presidenciales sus choques fueron constantes. La victoria global sonrió a Le Pen, que obtuvo el 17,9% de los votos frente al 11,1% de Mélenchon, aunque este presumió de haber impedido un mayor avance del FN. Ahora, el exprofesor y eurodiputado ha decidido disputar a su gran enemiga el escaño en la Asamblea Nacional sabiendo que parte con desventaja.

Le Pen fue la más votada en esta localidad que vivía de la minería al lograr el 31% de los votos en la primera vuelta, frente al 14,8% del Frente de Izquierda. En la segunda ronda, Hollande se impuso a Sarkozy con el 60,5% de los sufragios.

Jean-Luc Melenchon anuncia su candidatura.
Jean-Luc Melenchon anuncia su candidatura.PASCAL ROSSIGNOL (REUTERS)

“Todos entendemos el carácter extraordinario de esta decisión”, ha dicho Mélenchon al presentar su candidatura con aire grave en Hénin-Beaumont. “No será la pelea de perros que muchos esperan. Será una batalla de dimensión nacional, y me atrevería a decir, internacional. Se trata de batir a la extrema derecha”. Le Pen replicó con un sarcasmo: “No se trata de rabia, se trata de amor, ¡no puede vivir sin mí!”.

Hénin-Beaumont, un pujante polo industrial en los años ochenta sacudido por los cierres de fábricas, es el símbolo del crecimiento del Frente Nacional entre las clases populares. Los socialistas salieron malparados porque uno de sus alcaldes fue condenado por corrupción, y Le Pen aprovechó la ausencia de la UMP para convertirse en la gran referencia electoral.

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