Una ola de huelgas y bloqueos de carreteras paraliza Bolivia durante días

Los transportistas colapsaron el jueves el centro de La Paz, en protesta por una ley municipal que intenta reordenar el caótico tráfico de la ciudad. Se suman así a una oleada de huelgas y bloqueos de médicos, maestros y campesinos de varias regiones de Bolivia por demandas laborales y regionales.

Decenas de chóferes afiliados a la Central Única de Transporte Urbano de La Paz bloquearon con sus vehículos las principales vías de esta ciudad de cerca de un millón de habitantes, encaramada en los Andes a más de 3.600 metros sobre el nivel del mar. Los transportistas y chóferes se oponen a que el municipio ejecute un proyecto de transporte masivo para esta población de casi un millón de habitantes, cuyas avenidas y calles están atestadas por miles de pequeños autobuses y taxis colectivos, la mayoría viejos, deteriorados y contaminantes.

Mientras, la principal carretera boliviana hacia Chile, que utilizan los camiones para llegar a los puertos chilenos de Arica e Iquique, permaneció el jueves bloqueada por cuarto día, por campesinos que reclaman la construcción de otra ruta en esa zona.

El corte de la vía mantiene atrapados a un millar de vehículos, un tercio de ellos camiones que llevan combustibles desde esos puertos a diversas ciudades bolivianas, según medios locales.

Un grupo de turistas brasileños procedentes de Chile quedó atrapado en el bloqueo y tuvo que caminar decenas de kilómetros hasta que encontraron vehículos para seguir su viaje, dijo a Efe una fuente de la embajada de Brasil en La Paz.

El primer día de la protesta, la policía suspendió la salida de los autobuses de pasajeros desde La Paz hacia Chile, a la espera de una solución al conflicto con los dirigentes campesinos, que reclaman la presencia de las autoridades en esa zona para negociar sus demandas.

En paralelo, continua el conflicto de los médicos, algunos de cuyos dirigentes, junto con decenas de trabajadores de la salud, cumplieron este jueves nueve días en huelga de hambre. Los médicos y los empleados de la salud pública están en huelga indefinida desde la semana pasada para protestar contra el aumento de 6 a 8 horas de trabajo.

El Gobierno no ha logrado resolver ninguno de esos conflictos, ni las demandas de la Central Obrera Boliviana (COB), la mayor organización sindical del país, que pide un incremento salarial superior al 7 % propuesto para 2012 por Morales. El Ejecutivo ofreció el miércoles mejorar del 15 al 18 % el reajuste para el sueldo mínimo, que es de 117 dólares mensuales (unos 90 euros), el más bajo de los países andinos, según el centro de estudios Cedla. Sí logró resolver parcialmente su conflicto con los maestros urbanos, cuyos líderes se habían emparedado e iniciaron huelgas de hambre por mejoras salariales.

El salario medio en Bolivia es de 546 dólares mensuales (417 euros), uno de los más bajos de Sudamérica.