Al menos 15 muertos en un atentado contra civiles en el sur de Afganistán

Al menos 15 civiles han muerto por la explosión de una bomba caminera en la conflictiva provincia de Helmand . Entre las víctimas hay varios mujeres y niños. Las minas y las bombas camineras de fabricación casera son uno de los métodos que suelen emplear los insurgentes talibanes para hostigar a las tropas internacionales desplegadas en Afganistán, aunque suelen causar bajas entre la población civil.

Los hechos ocurrieron en la tarde de ayer, viernes, en una zona aislada del distrito de Janishin, donde un artefacto explosivo estalló al paso de un vehículo en el que viajaban los civiles, según ha explicado el portavoz del gobernador de Helmand, Daud Ahmadi. Ahmadi ha culpado de la explosión a la insurgencia talibán.

Según un informe de la ONU, 2.412 civiles perdieron la vida en 2009 en Afganistán a causa del conflicto armado que enfrenta a los talibanes contra el Ejército regular afgano y las tropas internacionales desplegadas en el país. En febrero de este año, miles de soldados internacionales y afganos lanzaron una gran operación en un distrito helmandí con el objetivo de desalojar a los talibanes del núcleo urbano de Marjah.

Atentado contra la policía

Al menos seis personas han resultado heridas como consecuencia de la potente explosión de una bomba ante la sede de la Policía afgana en la ciudad de Kandahar. Los heridos son cuatro policías y dos civiles afectados por la onda expansiva de la explosión de un coche bomba en un aparcamiento de las inmediaciones del cuartel policial, según ha informado el portavoz de la Gobernación provincial, Zalmai Ayoubi.

Se desconoce si la bomba fue detonada por control remoto o si se trata de un ataque suicida. No obstante, la detonación ha causado cuantiosos daños materiales: cuatro coches de Policía han quedado destruidos y han resultado rotas todas las ventanas del cuartel, así como las de la sede provincial del Ministerio de Información y Cultura.