'Querido Papi Noel', un libro instantáneo nacido en Facebook, formula 101 preguntas a Berlusconi

Mientras la crisis con su aliado Gianfranco Fini se desliza inexorable hacia la ruptura -el Pueblo de la Libertad ha hecho saber hoy a Fini que si no le gusta lo que hay, la puerta está ahí-, a Silvio Berlusconi le siguen creciendo los enanos por doquier.

El último movimiento popular contra Il Cavaliere ha nacido en Facebook, cuenta ya con 400.000 adhesiones, y promete convertir Roma el sábado próximo en una gran fiesta antiberlusconiana. La cita se llama No B. Day (Día del No a Berlusconi), y desborda sentido de la democracia, imaginación y compromiso digital.

El movimiento, que crece hora a hora, ha dejado de piedra a la ya de por sí anquilosada oposición del Partido Democrático, que lleva semanas decidiendo si se suma o no a la manifestación.

Su última invención se ha conocido hoy. Se trata de un libro instantáneo, titulado Caro Papi Natale (Querido Papi Noel), y nacido del blog 'Rassegna Stanca' (juego de palabras con rassegna stampa (resumen de prensa: algo así como resumen cansado). El libro contiene 101 preguntas elaboradas por más de 6.000 autores para el que llaman, en otro giro intencionado, "el reticente del consejo".

Entre bromas y veras, las cuestiones ponen en solfa toda la epopeya berlusconiana, desde el nunca aclarado origen de su patrimonio hasta los escándalos con velinas y prostitutas que obtienen candidaturas políticas.

Algunas son irónicamente incisivas, como ésta: "Usted empezó vendiendo escobas eléctricas (aspiradores) puerta por puerta (porta a porta) y ha acabado vendiendo trolas en (el programa de televisión) Porta a Porta: ¿Puede decirse que ha hecho carrera?".

Otras son muy serias: "Usted y Marcello Dell'Utri, incluso recientemente, han definido al varias veces homicida Vittorio Mangano como un héroe. ¿Puede definirse como un héroe a un miembro de la organización criminal que mató a (los jueces) Falcone y Borsellino?".

Las preguntas se dividen en cinco capítulos que van desde la política al choque con la justicia, la obsesión del complot que trata de hacerlo caer, sus difíciles relaciones con la prensa y sus amistades femeninas.

Los internautas disparan a quemarropa sobre Noemi Letizia ("¿es verdad que le prometió ayudarla en su carrera del espectáculo?"), citan a su mujer Veronica Lario ("mi marido frecuenta menores"), cuestionan sobre las velinas candidatas ("¿no encuentra grave haber recompensado con candidaturas y promesas a las chicas que le llaman Papi?"), e ironizan sobre las capacidades amatorias del presidente: "A los 73 años tres horas de sexo por noche: ¿está disponible para el control antidoping?".

Muchas de las preguntas se remontan a los años setenta, al origen de la fortuna del joven Berlusconi que inicia su carrera como constructor con el proyecto faraónico llamado Milano 2, tras ingresar 3.000 millones de liras del Banco Rasini. "¿De dónde venía el dinero?". "¿Cómo nació Fininvest?" "De dónde salieron los millones para la ampliación de capital?".

El epílogo se deja a la firma de Umberto Bossi, el aliado que hoy sostiene a la mayoría de centro derecha. El libro recoge una selección de las frases que el líder padano pronunció sobre Berlusconi entre 1994 y 1999. "Es un secretario de Craxi; es el hombre de la mafia, un palermitano que habla meneghino enviado apropósito para engañar al Norte. Fininvest nació de Cosa Nostra. Estaba en la P2 y gana dinero con la heroína y la cocaína... Ha hecho lo que ha querido con las televisiones... Al final tendrá un lugar en el infierno, porque no lo admiten ni en el purgatorio".

La lectura de la lista suscita una duda metódica: ¿Serán Facebook e Internet parte del principio del fin de la aventura del Cavaliere de Arcore?

De momento, Berlusconi, bromeando durante la conferencia internacional Italia-America Latina, ha afirmado que está listo para irse a Panamá. Después de que el presidente panameño Ricardo Martinelli glosara los atractivos de su país, Berlusconi ha tomado la palabra y ha asegurado: "Después de lo que ha dicho el presidente Martinelli, corro a casa a hacer las maletas y me traslado a Panamá. Echaré de menos La Repubblica, L'Unità, Annozzero y a los jueces, pero creo que estaré bien y pido al presidente que me dé una acogida digna".