El TPIY rechaza las dos apelaciones de Karadzic

En el plazo de pocas horas, Radovan Karadzic, ex líder serbobosnio acusado de genocidio y crímenes de guerra y contra la humanidad por la guerra de Bosnia (1992-1995), ha visto rechazadas sus dos últimas apelaciones contra su próximo juicio ante el Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia (TPIY). A partir de ahora, la fecha de inicio del proceso está en manos de los fiscales. Ellos deben presentar lo antes posible la versión definitiva y condensada de los cargos que se le imputan.

La medida, ordenada por los jueces, pretende ahorrar tiempo sin perder garantías legales. En cuanto ello suceda, el propio Karadzic, que se defiende a sí mismo, dispondrá de una semana para leer el nuevo pliego de acusaciones. Ante el aparente baile de fechas que ello podría implicar, el propio Tribunal ha subrayado ayer que "la apertura del proceso puede producirse en cualquier momento a partir del 21 de octubre. Esa era la fecha aproximada barajada por los jueces, pero todo depende de la rapidez de la fiscalía en remitir la nueva acusación", han dicho sus portavoces.

Las dos vías de Karadzic

Karadzic, de 64 años, había abierto dos frentes para evitar el juicio. En virtud del primero, reclamaba inmunidad "porque Estados Unidos se la prometió en 1996 a través de su entonces mediador en el conflicto de los Balcanes, Richard Holbrooke". En su resolución final, los cinco jueces de apelación del TPIY señalaron que "incluso de haber existido dicho pacto, éste no comprometería la jurisdicción del tribunal ni tampoco impediría la celebración del juicio". Eso sí, invitaron a Karazdic a que presentara pruebas del supuesto trato, "por si pudiera afectar a la sentencia que vaya a dictarse en su día".

Una vez cerrada la vía de la inmunidad, los jueces de apelación rechazaron asimismo la petición de Karadzic de retrasar la apertura del proceso al menos 10 meses. Según el TPIY, el antiguo político ha tenido tiempo, y asesoría legal, suficiente de preparar su defensa. Lo único que le concedieron fue el plazo de una semana para leer las alegaciones que están afinando los fiscales. Los jueces pretenden así evitar que pueda repetirse el caso del ex presidente serbio, Slobodan Milosevic, muerto sin sentencia tras cuatro años de proceso.

A Karadzic se le imputan 11 cargos: dos por genocidio y el resto por crímenes de guerra y contra la humanidad. El genocidio fue cometido en Srebrenica, donde perecieron 8.000 varones musulmanes a manos de las tropas serbobosnias. También lo hubo, según los fiscales, en el sitio de Sarajevo, con unas 12.000 víctimas civiles. El antiguo político niega todas las acusaciones.