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Noticias de la no-Europa

1. No ha pasado inadvertida, aunque es evidente que no ha levantado polvareda alguna en el conjunto de la Unión. El último día de junio el Tribunal Constitucional alemán dio luz verde al Tratado de Lisboa, exigiendo únicamente a su Parlamento una modificación legal que permita un mayor control parlamentario de los futuros actos legislativos de la Unión. Han respirado de alivio quienes temían un inesperado descarrilamiento del Tratado en proceso de ratificación, al que sólo le falta saltar un obstáculo sustancial, como es el referéndum irlandés el próximo 2 de octubre. Pero quizá han respirado demasiado hondo y demasiado pronto. La sentencia alemana da por bueno el Tratado, pero respecto al futuro de la construcción europea nos dice que hasta aquí hemos llegado, y que si queremos seguir avanzando, como era reglamentario en el europeísmo al uso hasta ahora, deberemos modificar ni más ni menos que la Constitución alemana.

La sentencia tiene la virtud de la claridad. Es como una lectura jurídica de los últimos avatares europeos, incluidos los resultados de las elecciones al Parlamento Europeo. Aunque la UE tenga la forma de un Estado federal en algunas de sus políticas, nos dice el tribunal, en cuanto a toma de decisiones internas y nombramientos funciona como las organizaciones internacionales, guiada por el principio de igualdad entre los Estados, y esto no se puede cambiar sin reformar la propia Constitución alemana (y quizá otras constituciones nacionales, según podrán deducir los respectivos tribunales constitucionales o equivalentes). La alta corte alemana desmiente la teoría del déficit democrático europeo entendido como una adolescencia que se curará con el tiempo: no, se trata de algo estructural. No hay un pueblo europeo sino varios, organizados en sus Estados respectivos, los únicos plenamente soberanos.

Sabíamos desde el principio que la ampliación de la UE debía ir de la mano de la profundización. Quienes no querían la segunda, encabezados por Londres, abogaron por la primera a toda costa. Y se han llevado el gato al agua: tenemos una gran Unión de 27 miembros, pero deshilachada y sin dinámica alguna que conduzca hacia una futura profundización. Ahora los dos países que en su día ejercieron de motores, Francia y Alemania, han colocado cada uno un obstáculo insalvable tanto para futuras ampliaciones como para futuras profundizaciones. El primero, pensando en excluir a Turquía, exigirá un referéndum para cualquier nuevo ingreso después de la entrada de los precandidatos balcánicos. El segundo pedirá una reforma de la Constitución alemana antes de entregar nuevos poderes soberanos, por ejemplo, en fiscalidad o defensa. El presidente francés y el Tribunal Constitucional alemán son las instituciones que en cada caso han puesto pie en pared, y no es extraño, porque ambos son los guardianes de las soberanías y constituciones respectivas.

2. Ocho ex presidentes y primeros ministros, otros tantos ex ministros y otras personalidades de nueve de los socios europeos del este y del centro de Europa (Pecos), encabezados por Václav Havel, han dirigido una carta abierta, llena de dramatismo e incluso de alarma, al presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, llamando su atención para que no les abandone ante el renacimiento de las ambiciones y reflejos imperiales de la potencia imperial que antaño les sojuzgó. Tampoco esta noticia ha pasado inadvertida, pero todavía ha levantado menos polvareda. Ya no estamos en el corazón de la política exterior norteamericana, se lamentan los insignes corresponsales, que le recuerdan a Obama hasta dónde llegó su lealtad y su agradecimiento por su apoyo durante la guerra fría y sobre todo en la transición hacia la democracia. No se olvidan de mencionar su participación en la guerra de Irak, por la que algunos tuvieron que pagar, según recuerdan, un duro precio. Y su adhesión, más por resignación que por convicción, a un vago europeísmo en el que quisieran ver a Washington más comprometido.

3. La opinión pública europea no existe. Le sucede como a sus pueblos. Si hay algo que se le parece es la suma de sus 27 opiniones públicas respectivas. ¿Pero no son éstas noticias europeas? El problema es que son noticias sin Europa. O lo que es peor todavía, noticias de la no-Europa. Lo es la iniciativa de los dirigentes políticos de los antiguos Pecos y lo es también la sentencia del Tribunal Constitucional alemán. Pero la mayor de todas ellas, la gran noticia sobre la no-Europa es la indiferencia de sus ciudadanos sobre el presente y el futuro de esta desunión en el mismo momento en que las sonoras pisadas de China, la India y Brasil hacen temblar los escenarios de la política y la economía internacionales.

(Enlaces: con el site del tribunal constitucional alemán, donde se puede acceder a la nota de prensa en inglés y a la sentencia; y con la carta de los ex dirigentes de los países del centro y el este europeo a Obama).

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Comentarios

Se sabía desde un principio, pese a la decada de los 90, que Europa colisionaría con los Estados Nacionales. Tristemente, la idea de un federalismo pan-nacional no cuajó sino para un marco económico, pero no ha cundido en una conciencia política de los europeos. Esta Europa, vieja e indecisa, deja paso a los grandes paises emergentes, con cada vez menos peso que oponerles en diversos temas como los derechos humanos.
EUROPA ¿QUE ES ESO? EL PATIO DE D. SILVIO Y SUS PUTILLAShttp://comielotrodia.wordpress.com
Aquí os dejo un enlace a una página muy interesante, empeñada en informarnos sobre el Tratado de Lisboa y el enlace dentro de esta página de una versión "reader-friendly" del dichoso tratado, para los que quieran conocer todas esas "bendiciones" que inundaran nuestras vidas en el momento en que pueda ser ratificado por todos de una p… vez; incluidos los díscolos irlandeses, a los que se les da una segunda oportunidad para enmendar el grave error que cometieron no ratificando “this great pile of s…”, y que entre otras cosas, nos permitirá competir con China y demás economías emergentes, porque el Tratado de Lisboa:- “Hará vinculantes el caso Laval y juicios relacionados del Tribunal de Justicia de la UE (http://www.eurofound.europa.eu/eiro/2008/01/articles/eu0801019i.htm) poniendo las normas sobre competencia de mercado de la UE por encima de los derechos de los sindicatos para que se respeten normas sobre sueldos superiores al sueldo base para inmigrantes, amenazando de esta manera a los trabajadores del mismo gremio del país. Ya ven, llegará el día que para poder trabajar tendremos que pagar, porque siempre habrá alguien que venga dispuesto/obligado a cobrar mucho menos que tú.- Permitirá la constitución de un Estado Federal de la UE que tendrá primacía sobre la constitución española y otras constituciones nacionales. La Europa del Tratado de Lisboa, por primera vez estará separada y será superior a sus 27 estados miembros, pudiendo firmar tratados internacionales con otros estados para todas las áreas de sus poderes. En términos constitucionales, el Tratado de Lisboa convertirá a España en un estado provincial o regional dentro de esta nueva Europa Federal, donde la Constitución de la UE y sus leyes estarán por encima de la Constitución y leyes españolas en casos de conflicto entre ellas.”Indymedia IrelandPágina web: http://en.euabc.com/Versión reader-friendly del Tratado:http://www.eudemocrats.org/fileadmin/user_upload/Documents/Reader_friendly_til_nettet.pdf
Habria que diferenciar entre algunos dirigentes politicos que culpan a Europa de todos sus males y la inmensa mayoria de ciudadanos, sobre todo del Este, que son europeistas. Europa es el 'sueño americano' de muchos de ellos. Otra cosa es que los populismos de Europa oriental manipulen a sus electores. Europa es el 'joker' que utilizan muchas elites politicas en todo el continente para justificar una mala gestion nacional. E incide sobre los ciudadanos desinformados, que son la mayor parte.

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