El Ejército de Comoras ocupa la isla rebelde de Anjouan
El Gobierno central del archipiélago y la Unión Africana atacan la capital del territorio para derrocar a su autodeclarado presidente
El Ejército de la Unión de las Comoras, un paraíso turístico en el océano Índico frecuentado por occidentales, integrado por las islas Gran Comora, Mohéli y Anjouan, ha lanzado una fuerte ofensiva para tomar el control de la isla rebelde de Anjouan junto a una "primera oleada" de 400 soldados de la Unión Africana.
Según informa Reuters, el Gobierno central de la Unión, presidido por Ahmed Abdallah Sambi, ha ordenado una intervención armada respaldada por la Unión Africana para derrocar al autodeclarado presidente de la pequeña isla, Mohamed Bacar, que había desafiado al Gobierno de la Unión desde las elecciones declaradas ilegales de 2007, en las que se había autoproclamado líder de Anjouan.
Por el momento, ni el autodeclarado presidente de Anjouan ni sus colaboradores han podido ser localizados. Según las últimas informaciones que el ministro de Defensa de las Comoras ha facilitado a AFP se mantienen los combates con fuerzas militares de Bacar. Sin embargo, otras fuerzas militares han manifestado ya que el control sobre la isla es prácticamente "total".
Con unas 1.350 tropas de apoyo de la Unión Africana, el Gobierno parece haber expulsado al líder local de Anjouan, Mohamed Bacar, un antiguo gendarme entrenado por los franceses, que dirige una milicia de varios cientos de hombres.
Un obstáculo más en una historia turbulenta
La historia del pequeño archipiélago musulmán de tres islas situado entre el norte de Madagascar y el norte de Mozambique, la Unión de Comoras, se encuentra salpicada de golpes de estado desde su independencia de Francia en 1975.
Como otros tantos países surgidos de la descolonización en los años 60 y 70, el primer presidente fue rápidamente depuesto en un golpe militar. Desde entonces, otros 19 golpes de estado se sucedieron hasta que en 2002, el último gobernante golpista, el anterior jefe de Estado Mayor Azali Assoumani, se vio obligado a convocar unas elecciones que ganó. La falta de legitimidad que arrastraba le llevó promulgar una serie de cambios constitucionales que culminaron en unas nuevas elecciones en 2005, que no ganó.
El nuevo presidente, el clérigo musulmán suní Ahmed Abdallah Mohamed Sambi, estrenó un nuevo orden constitucional que establecía una república federal con presidencias rotatorias repartidas entre cada una de las islas mayores cada cuatro años. Cada isla mantiene su propio gobierno y constitución. Los cambios no parecen haber afectado a la empobrecida población, en un 80% consagrada a la agricultura y la pesca.
Sin embargo, el presidente de la isla de Anjouan, la mayor del archipiélago, comenzó a negar la colaboración con el gobierno central en 2006 y se negó a convocar nuevas elecciones en 2007. A instancias del presidente sudafricano, Thabo Mbeki, la Unión Africana impuso sanciones y un bloqueo naval a la isla, además de desplegar 1.350 soldados en las demás islas. El movimiento de hoy puede suponer el retorno de la isla rebelde al archipiélago.
Queda por ver la reacción de Francia, que mantiene la soberanía sobre la cuarta isla de Mayotte, donde tiene destacado un contingente de la legión extranjera. También es la encargada de adiestrar al ejército del archipiélago y de su marina de guerra, en virtud de acuerdos bilaterales.
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