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Diez mil personas recuerdan al periodista Hrant Dink, asesinado hace un año

El intelectual dedicó parte de su vida a combatir el nacionalismo existente en Turquía y a mejorar la convivencia entre turcos y armenios

Unas diez mil personas, 8.000 según la policía, se han congregado hoy en Estambul para conmemorar el primer aniversario del asesinato del periodista turco de origen armenio Hrant Dink. "En el mismo lugar y a la misma hora" fue el mensaje con el que los manifestantes se han concentrado a las puertas del semanario Agos, donde el periodista fue asesinado de tres disparos el pasado año.

Los participantes han exigido justicia para un crimen que conmocionó a la sociedad turca y puso en guardia a muchos contra los excesos del nacionalismo. "El ruido de la sangre se calla con justicia. Pero, ¿qué ha hecho la Justicia aparte de darle una bandera al asesino y hacerse una foto?", ha criticado Rakel Dink, viuda del periodista asesinado, en referencia a los numerosos escándalos que han rodeado la investigación y la trama del asesinato.

Apenas unas horas después de que el acusado de ser el autor material del asesinato, el joven Ogun Samast, fuese detenido, los policías que lo capturaron se hicieron fotografiar con él en actitud heroica.

Poco a poco nuevos nombres aparecieron en la trama, entre ellos los de Yasin Hayal, un joven con contactos en partidos ultrancionalistas, y Erhan Tüncel, informador de la policía. Todo indica además que los encargados de la Dirección de Seguridad de Estambul desatendieron las llamadas de protección de Hrant Dink e ignoraron las informaciones que apuntaban a la comisión del asesinato.

"Todos somos Hrant, todos somos armenios"

"El Estado es el asesino", han coreado muchos de los asistentes a la manifestación de hoy que portaban pancartas con el texto "Por Hrant, por la Justicia" en turco, armenio y kurdo, reclamando que se esclarezca la implicación de personal de las fuerzas de seguridad en el crimen.

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Otro de los gritos ha sido "Todos somos Hrant, todos somos armenios", que, desde la muerte de Dink, se ha convertido en un lema contra el nacionalismo y a favor de la convivencia de las diversas etnias y religiones de Turquía.

Hrant Dink fue un importante intelectual que dedicó buena parte de su vida y de sus escritos -en el semanario bilingüe Agos y en el diario izquierdista BirGün- a combatir el nacionalismo existente en Turquía y a mejorar la convivencia entre turcos y armenios.

Pero por calificar de genocidio las matanzas de armenios a manos del Imperio Otomano en 1915, Dink fue condenado a 6 meses de cárcel en base al polémico artículo 301 del Código Penal, aunque su condena fue conmutada.

El asesinato de Hrant Dink fue rememorado también en la capital turca Ankara donde 1.500 personas se congregaron frente a las oficinas del diario BirGün, y en otras ciudades de Turquía con diversos actos.

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