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Lula descarta presentar de nuevo su candidatura a la presidencia en 2010

El gobernante brasileño rechaza categóricamente una reforma constitucional

El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, ha descartado categóricamente que vaya a presentar su candidatura en las elecciones de 2010, al tiempo que añadió que hará todo lo posible para elegir a un aspirante de su preferencia, que "no tiene por qué ser de su partido", el Partido de los Trabajadoreres (PT). Así lo afirmó el martes en una conferencia de prensa, la primera concedida despues de su reelección en 2006.

"Para no jugar con la democracia, no pensaré ni imaginaré ninguna hipótesis [que implique] un tercer mandato", dijo Lula, quien añadió que consideraría una provocación democrática cualquier intento para lograr una segunda reelección. Con esas palabras, Lula ha barrido definitivamente todas las especualaciones acerca de una posible maniobra para cambiar la Constitución y así poder presentarse por tercera vez a las elecciones.

Las declaraciones de Lula han dado un nuevo impulso a la estabilidad económica y democrática del país. Con ellas, parece quedar claro que Lula no va a seguir los pasos de su homólogo venezolano, Hugo Chávez, forzando la Constitución para continuar en el poder indefinidamente. Además, sus insinuaciones en el sentido de que su sucesor debería proceder de la actual coalición de Gobierno han servido para reforzar más al actual Ejecutivo.

El único preocupado es el PT, ya que Lula ha dicho explícitamente que su sucesor en la candidatura presidencial no tiene por qué salir de las filas de su partido. Los dirigentes del PT han anunciado, sin embargo, que el partido va a presentar un candidato propio, que podría ser al mismo tiempo el candidato de la coalición de Gobierno. Pero todos saben que Lula no piensa en un candidato de su partido.

El anuncio de Lula ha puesto ya en marcha todos los engranajes de las candidaturas presidenciales en los partidos brasileños. Todos saben que es muy difícil que un candidato gane en 2010 contra Lula, es decir contra la gestión del actual Gobierno. Por eso, el presidente quiere que su sucesor provenga de la coalición "para continuar su política", que, según Lula, ha sido la mejor de las últimas décadas.

Coincidiendo (o no) con las declaraciones de Lula, el real volvió a revalorizarse ayer, dejando al dólar bajo la línea psicológica de menos de dos reales, exactamente a 1,90.

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Luiz Inácio Lula da Silva, ayer en el palacio de Planalto.
Luiz Inácio Lula da Silva, ayer en el palacio de Planalto.REUTERS

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