La policía nicaragüense se incauta de dos toneladas de cocaína

La Operación Gladiador, desencadenada el martes por la policía antidrogas de Nicaragua, ha asestado un nuevo golpe al narcotráfico internacional. Frente a las concurridas playas de Pochomil y Masachapa, en el océano Pacífico, las fuerzas nicaragüenses interceptaron una lancha rápida, capturaron a sus cinco tripulantes ?cuatro colombianos y un guatemalteco? y se incautaron de un cargamento de dos toneladas de cocaína, valorado en 50 millones de dólares, aproximadamente.

Según las informaciones manejadas por los servicios de espionaje policial nicaragüenses, se sabía que la lancha capturada trabajaba en distintos puntos del litoral del Pacífico nicaragüense, hasta que finalmente fue localizada frente a Pochomil, un balneario popular cuyos visitantes pudieron seguir los pormenores del operativo, con 45 agentes que vestían trajes camuflados y portaban armas, que no llegaron a usar. "Gracias a Dios, no hubo disparos", reconoció el jefe policial Alfonso Sevilla, quien además aclaró que "este grupo no pertenece al Cartel de Sinaloa, México".

El pasado 13 de abril, cinco narcotraficantes mexicanos cayeron en manos de la policía de manera casual, cuando el vehículo en el que viajaban fue detenido en una carretera rural, al norte de Managua, por un agente de tráfico. Aquel hecho llevó al desmantelamiento de una base logística del Cartel de Sinaloa, que dirige el prófugo de la justicia mexicana, Joaquín El Chapo Guzmán. Seis mexicanos fueron detenidos, así como una veintena de nicaragüenses, a quienes se les decomisó 13 vehículos, un camión cisterna para gasolina de avión y un importante arsenal.

Los mexicanos capturados, según la policía de Nicaragua, eran sicarios enviados para "ajustar cuentas" con personas que han robado a la banda, así como a funcionarios que han incumplido compromisos con los narcotraficantes, quienes también habían construido una pista de aterrizaje para avionetas capaces de cargar varias toneladas de drogas. La policía local estima que la red de miembros y colaboradores del Cartel de Sinaloa puede sobrepasar las 120 personas, entre transportistas, sicarios y testaferros.

Por otra parte, desde Costa Rica se informó de la captura y procesamiento judicial de cinco colombianos ?cuatro hombres y una mujer? acusados de narcotráfico y de formar parte de una banda que trafica con armas compradas en Nicaragua y cambiadas por droga en Colombia. Dos europeos relacionados con este grupo mafioso, el austriaco Albin Franz Burkhard, de 61 años de edad, y el holandés Alfred Hermisin Olias, de 38 años, se han dado a la fuga.

Según las autoridades costarricenses, esta banda pretendía almacenar 15 toneladas de cocaína para ser reenviada a España, Alemania y Estados Unidos. La droga era almacenada en una lujosa residencia en la zona de Heredia, en los alrededores de San José, capital de Costa Rica, donde fueron decomisadas tres toneladas de cocaína.