Más de 50 muertos en una nueva jornada de enfrentamientos entre chiíes y suníes

El fantasma de la guerra civil pasea de nuevo por las calles de Irak, después de que docenas de personas —entre ellas, mujeres y niños— a sangre fría por milicianos de la rama chií del islam en un barrio de Bagdad de mayoría suní. La respuesta no ha tardado en llegar, y un doble atentado con coche bomba ha provocado la muerte de al menos 18 personas en una mezquita chií situada en el centro de la capital.

Varios políticos suníes y fuentes policiales han cifrado en 40 las víctimas de la oleada violenta que han sufrido esta mañana, y han acusado a las milicias del clérigo radical Muqtada Al Sadr de estar detrás de los asesinatos. Según estas fuentes, los pistoleros establecieron un falso control de carreteras para identificar a conductores y viandantes, con el objeto de asesinar luego a aquellos que tuvieran un nombre típico de la rama suní.

"Los pistoleros están matando a civiles suníes a partir de sus tarjetas de identidad", ha explicado una fuente del Ministerio de Interior. Sin embargo, un político chií ha señalado que los milicianos de Al Sadr han entrado en el barrio de Yihad en busca de los responsables del atentado de ayer.

Las tropas estadounidenses e iraquíes han sellado el área afectada, que sobrevuelan ahora los helicópteros militares norteamericanos. Un testigo ha narrado a la agencia de noticias Reuters que pudo escuchar un tiroteo y luego vio los cadáveres de cuatro hombres tendidos en una cuneta de la carretera. Todos estaban atados, y varios tenían una venda en los ojos.

Las milicias chiíes han sellado ahora las entradas a uno de sus distritos del oeste de la capital y han ordenado a sus vecinos que no salgan de casa, pues temen las represalias de los suníes.

Respuesta

La respuesta a este ataque se ha producido a primera hora de la tarde, en las inmediaciones de una mezquita chií situada en el centro de Bagdad. Al menos 20 personas han muerto tras la explosión de dos coches bomba; la primera tuvo lugar en torno a las 18.45 (16.45 hora peninsular española) en las inmediaciones del templo Ahel Al Beit, en el barrio Al Waziria. Diez minutos después, cuando una multitud se había acercado al lugar para tratar de socorrer a las víctimas, un segundo coche bomba ha hecho explosión en la misma zona.

Además de las pérdidas humanas, estas explosiones han provocado numerosas pérdidas materiales. El edificio de la mezquita se ha visto afectado por los ataques, al igual que dos bloques de viviendas situados en la misma zona. Además, hasta 14 vehículos han quedado calcinados.