Los partidos de la 'Revolución Naranja' llegan a un acuerdo para gobernar Ucrania en coalición
La ex primera ministra Yulia Tymoshenko ocupará el cargo de primera ministra, como líder de la segunda fuerza más votada en las elecciones del pasado marzo
Las tres formaciones que protagonizaron la denominada Revolución Naranja han llegado a un acuerdo para gobernar Ucrania en coalición e impulsar un Gobierno pro occidental, después de más de tres meses de negociaciones tras las elecciones del pasado 26 de marzo. El objetivo de la coalición es evitar el regreso al poder del vencedor de los comicios, el ex primer ministro prorruso Víctor Yanúkovich, que gobernaba Ucrania al frente del partido Regiones cuando se desató la Revolución Naranja. El principal escollo de la negociación era la exigencia de la ex primera ministra Yulia Timoshenko de liderar el Ejecutivo. Finalmente, ocupará el cargo de primera ministra, como líder de la segunda fuerza más votada en las elecciones.
Los partidos de la coalición serán Nuestra Ucrania, del presidente Víctor Yushchenko; el Bloque de Tymoshenko y el Partido Socialista.
Tymoshenko ha querido transmitir un mensaje de firmeza al realizar el anuncio. Se acabaron los tiempos de protección para los magnates de los negocios que no respetan la ley. Hoy comenzamos nuestra lucha para que nuestro país sea democrático", ha afirmado Tymoshenko, entre los aplausos del hemiciclo.
La primera promesa que ha anunciado Timoshenko como futura primera ministra es la revisión de los acuerdos de gas con Rusia. El acuerdo sobre la importación de gas ruso por parte de Ucrania expira en junio y el gigante ruso Gazprom ya ha avisado que aumentará el precio del gas a Kiev.
El proceso final de las negociaciones
La semana pasada se aceleraron las negociaciones. El Parlamento ucranio debía formar Gobierno antes del 25 de junio, porque si no, el presidente adquiriría el derecho a disolverlo.
Por eso, Nuestra Ucrania propuso una amplia coalición con la participación del Partido de las Regiones, liderado por Víktor Yanukóvich, principal rival de la Revolución naranja. Pero la carismática Timoshenko se manifestó categóricamente en contra: "Trabajaremos en la oposición" si la coalición con ese partido prospera, advirtió. Y enumeró los naranjas tres serios puntos de discrepancia con Yanukóvich: la actitud ante la OTAN, el idioma ruso y el espacio económico común con Bielorrusia, Kazajistán y Rusia. Finalente, Yanukóvich ha quedado fuera del Gobierno y Timoshenko será primera ministra.
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