"Queremos que Estados Unidos reconozca nuestro derecho a enriquecer uranio para fines pacíficos"
"Queremos que Estados Unidos reconozca nuestro derecho a enriquecer uranio para fines pacíficos", repite como un mantra Ali Akbar Javanfekr, el asesor de Prensa del presidente iraní. Es con seguridad una opinión que ambos comparten, porque este periodista que dirigió la exitosa campaña electoral de Mahmud Ahmadineyad está más cercano al presidente de lo que su cargo indica. "A veces me pide opinión en otros asuntos", admite de pasada. En un perfecto castellano, legado de sus años como corresponsal de IRNA en España, Javanfekr insiste también en la necesidad de que Washington "cambie de lenguaje" hacia Irán y hacia el mundo islámico, en general. "Si no el odio hacia los estadounidenses va a aumentar y eso no es beneficioso para la paz".
"Estados Unidos debe cambiar su lenguaje"
"No rechazamos hablar, pero sin condiciones"
Pregunta. ¿Cómo van a responder a Estados Unidos? ¿Van a aceptar negociar?
Respuesta. Para negociar hay que hablar un idioma que las dos partes entiendan y acepten. Estados Unidos sigue utilizando el mismo lenguaje: o aceptas lo que te propongo o te mato. Eso no es de recibo. Creo que están fuera de la realidad, que cada vez hay más distancia entre Estados Unidos y el resto del mundo. No queremos nada ni de Estados Unidos ni de Europa, sólo exigimos nuestros derechos reconocidos internacionalmente. No nos negamos a negociar, con lógica, con Estados Unidos o con otros países, pero debe haber una base de entendimiento. Queremos que ellos reconozcan nuestro derecho a enriquecer uranio para fines pacíficos. Si no, ¿para qué nos vamos a sentar a hablar?
P. Los europeos buscan garantías de que no se desviarán de ese uso pacífico.
R. No son ellos los que tienen que fijarlas, sino el Organismo Internacional de la Energía Atómica. Hemos anunciado públicamente que estamos en contra de las armas nucleares, lo prohíbe nuestra religión. Puede venir y controlar las actividades ((nucleares)) iraníes. ¿Qué más quieren?
P. La comunidad internacional espera que las negociaciones acerquen las posturas...
R. Dicen que la comunidad internacional se opone al enriquecimiento de uranio, pero eso no es cierto. Los 116 países del Movimiento de No Alineados han respaldado a Irán en su última cumbre. Eso es más importante que unos pocos. De nuevo, ((discrepamos)) del lenguaje.
P.¿Consideran al menos que Estados Unidos ha dado un paso después de 27 años de negarse a hablar con Irán?
R. No rechazamos hablar, pero sin condiciones. No nos negamos a hablar con un país reconocido en la ONU, sólo con el régimen sionista. Con Estados Unidos siempre hemos ((estado abiertos, pero)) planteado nuestras condiciones. Nosotros nunca hemos dado un golpe de estado en su territorio, ni apoyado a su oposición terrorista, ni les hemos presionado con el apoyo de nuestros amigos, ni retenido su dinero en nuestros bancos. Son ellos los que tienen que preparar el amino. Ahora la situación es diferente, vamos a hablar con ellos, pero las condiciones ((que plantean)) son inaceptables.
P. ¿Qué le ha parecido la propuesta de Viena? ¿Hay algún elemento nuevo?
R. Puede que la propuesta sea diferente, pero tienen que acompañarla del reconocimiento de nuestros derechos: el enriquecimiento de uranio con fines pacíficos.
P. ¿Pero tienen ustedes la sensación de que al menos se ha dado un paso en ese sentido, aunque sea pequeño?
R. Es un premio que no queremos. Queremos nuestros derechos. Como dijo el presidente, quiere nuestro oro a cambio de una chocolatina.
P. ¿Ni siquiera es suficiente para sentarse a negociar?
R. No estamos esperando a que Estados Unidos diga 'vamos a hablar con Irán', pero es una propuesta y la aceptamos. Si no tiene condiciones, aceptamos estudiarla. Para poder hablar, hay que estar al mismo nivel, o no llegaremos a ningún fin.
P. Sin embargo, los países europeos, y otros, si han visto un cambio en la actitud de Estados Unidos.
R. Estados Unidos y la Unión Europea están en un callejón sin salida y buscan una vía de escape. El tiempo ((que han dado)) en la ONU no era para Irán sino para ellos mismos, para encontrar el camino de salida. Nosotros tenemos una posición clara y que todo el mundo entiende. Nos apoyan 116 países. La crisis está allí no aquí. Aquí no tenemos ninguna crisis aunque también estamos preparados para situaciones anormales. El Gobierno está preparado. Pero tampoco queremos ((contribuir a)) su crisis. Queremos ayudarles a que salga de este callejón, que venga a hablar, a reconocer el derecho de Irán y a alcanzar un acuerdo aceptable para ambos.
P. Rusia y China han aplaudido la propuesta estadounidense. ¿Qué opina de su actitud?
R. Recibimos con buena voluntad la posición que han tenido hasta hoy y creo que van a seguir apoyando la posición iraní, porque la ven lógica. Y nosotros no damos la espalda hacia las iniciativas lógicas que puedan surgir, siempre que reconozcan nuestros derechos. No creo que vayan a cambiar de actitud cuando conozcan nuestra postura.
P. Algunos analistas interpretan que Washington lanzado la pelota a Irán para vencer la oposición de Rusia y China a un eventual castigo. Ahora si Irán se niega, tendrían que apoyarlo.
R. China y Rusia reconocen nuestro derecho a enriquecer uranio y nos apoyarán en su defensa en cualquier negociación. No creo que hayan cambiado sus posiciones. Me da la impresión de que la pelota aún no ha caído y veremos a ver dónde cae.
P. Entonces, ¿no vamos a ver próximamente la foto de iraníes y estadounidenses en la mesa de negociaciones?
R. De momento, no. No hay esa oportunidad. El lenguaje debe cambiar. Si la Unión Europea quiere ((ver)) un buen final, debe jugar un papel positivo hacia Irán porque también va en su beneficio que se alcance un acuerdo basado en ese reconocimiento.
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