Las inundaciones que afectan a Europa Central se cobran seis muertos

Las riadas que se están produciendo en Centroeuropa, provocadas tanto por las fuertes lluvias como por una ola de calor en algunas zonas que está provocando un rápido deshielo, han causado hasta el momento cinco muertos en la República Checa y uno en Eslovaquia. Mientras, en ciudades alemanas como la histórica Dresde, vecinos de algunos barrios han sido evacuados forzosamente por el riesgo de desbordamiento del río Elba.

Las autoridades checas han informado hoy de que un niño de cinco años ha muerto ahogado cerca de Trebic, en el sureste, al caer en una acequia. Este fallecimiento se suma al de un hombre de 57 años que se ahogó en el río Sazava (centro), después de volcar su lancha, y al de otras dos personas, cuyo vehículo averiado fuera arrastrado por las aguas desbocadas del río Ohre. Una quinta muerte se ha registrado en Veseli nad Luznici (sur) a consecuencia de un infarto.

El número de localidades en estado de máxima alerta en la República Checa asciende a 62, siendo las zonas más afectadas la ribera del río Morava y de su afluente Dije, que tienen en jaque a las poblaciones del Uherske Hradiste, Olomouc, Znojmo y Vranov nad Diji. Los fallos en la coordinación para minimizar el efecto de las inundaciones en esta región costaron ayer el puesto al jefe de esa cuenca hidrográfica, Miroslav Konecny, que será sustituido por el responsable económico de dicho ente, Pavel Mylbachr.

En Eslovaquia, el cadáver de un hombre de 61 años fue encontrado ayer en la localidad de Modra (oeste), después de permanecer desaparecido desde el miércoles. Las aguas han inundado medio millar de casas y las zonas más afectadas son los alrededores de la capital, Bratislava, y la región occidental de Trnava, en la cuenca del Morava. Al igual que en la República Checa, las autoridades eslovacas temen que la ola de calor acelere el proceso de deshielo en los Pequeños Cárpatos, lo que dificultaría la situación.

Centenares de evacuados

En Alemania, las autoridades de la ciudad de Dresde, en el este, han confirmado hoy la evacuación forzosa de 380 vecinos del barrio de Gohlis ante la crecida de las aguas del río Elba, que se unen a las 600 personas que han tenido que abandonar sus casas en la localidad de Bad Schandau.

El nivel del agua del Elba ya ha alcanzado los 7,27 metros de altura en Dresde, ciudad donde ayer se activó la alarma por catástrofe, y los técnicos prevén que mañana el agua alcance los 7,60 metros de altura. Como medida preventiva, los ayuntamientos de Dresde y Pirna han cerrado al tráfico los puentes que cruzan el río Elba, incluido el llamado Blaue Wunder (El milagro azul), uno de los más importantes de la ciudad.

La resistencia de algunos vecinos de Gohlins, en la zona norte de Dresde, a seguir la recomendación de abandonar sus casas ha obligado a adoptar esa medida, ha informado el concejal de Ordenamiento y Seguridad de la ciudad, Detlef Sittel. La pasada noche, dejaron voluntariamente sus viviendas unos 400 habitantes de ese barrio y medio centenar más de Laubegas, otro distrito de Dresde, pero una veintena de familias seguían en sus casas por considerar que se trataba sólo de una "recomendación".

Los equipos de protección civil y bomberos han reforzado los márgenes del río con sacos de arena y barreras de plástico y metal, pero incluso así hay riesgo de desbordamiento, puesto que las aguas seguirán creciendo al menos hasta mañana y luego tardarán días en volver a sus niveles normales. En Bad Schandau y Pirna, ambas al sur de Dresde, han sido evacuadas 1.500 personas y el nivel del Elba ha subido ya a los ocho metros.

La situación es asimismo tensa en Baviera, a pesar de que en las últimas horas ha decrecido el nivel del Danubio, mientras que en Sajonia-Anhalt, en el este del país, se han registrado los primeros desbordamientos en varios tramos del Elba.