Cavaco Silva toma posesión como presidente de Portugal

El nuevo presidente portugués, Aníbal Cavaco Silva, ha tomado hoy posesión como nuevo presidente de Portugal, en una ceremonia celebrada en la sede del Parlamento, en Lisboa. A la ceremonia han asistido unos 900 invitados, entre ellos los Príncipes de Asturias, don Felipe y doña Letizia, el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso; el Gran Duque Enrique de Luxemburgo; el ex presidente estadounidense George Bush; el francés Valery Giscard d'Estaing, y el ex titular de la Comisión Europea Jacques Delors. Cavaco ha prometido "cooperación leal y fructífera" con el Gobierno socialista.

En su discurso inaugural ante el Parlamento, poco después de la jura de su cargo, Cavaco Silva, de 66 años, ha recordado los compromisos de Portugal con la Unión Europea, un año antes de que asuma la Presidencia semestral rotatoria, y con la Alianza Atlántica. El nuevo presidente portugués ha lanzado cinco desafíos nacionales merecedores de "amplios consensos" y ha prometido una "cooperación leal y fructífera" con el Gobierno socialista. "No es posible pensar la política exterior independientemente de la realidad interna nacional. La defensa de los intereses de Portugal en el escenario internacional será tanto más fácil cuanto más confiados nos sintamos de nuestras capacidades".

Pero el grueso de su discurso de 28 páginas se ha centrado en su empeño por conseguir "una cooperación estratégica" con el Gobierno y demás órganos de soberanía y en promover amplios consensos para superar las dificultades. Así, ha prometido "tratar por igual a los representantes de todas las fuerzas políticas" y ser "presidente de todo Portugal". El cuarto presidente de la etapa democrática lusa iniciada en 1974, ha recordado en su toma de posesión que lospolíticos deben "dejar de lado las diferencias". Por ello, les ha invitado a la búsqueda de consensos en cinco campos, que consideró indispensables: economía, educación, justicia, seguridad social y mayor credibilidad de la política.

En materia económica ha destacado la respuesta urgente que esperan los portugueses y ha destacado la situación estratégica de su país en la UE, "somos el espacio donde Europa se abre al Atlántico, y ello puede beneficiarnos".Además de abogar por una mejor educación de los jóvenes lusos, en el terreno político ha propugnado una "guerra permanente" de todos contra la corrupción. "Los agentes políticos tienen que ser ejemplo de cultura, honestidad, transparencia, responsabilidad, rigor en el uso de los recursos del Estado, ética en el servicio público, respeto por la dignidad de las personas y cumplimiento de las promesas hechas".

Elogios para Sampaio

También ha tenido palabras de elogio para su predecesor, Jorge Sampaio, visiblemente emocionado al escucharlas en su último acto como jefe de Estado luso. Le han acompañado sus predecesores en el cargo, Mario Soares y Antonio Ramalho Eanes. Al inicio de la ceremonia, Cavaco Silva ha jurado la Constitución portuguesa, mientras sonaba el himno nacional en el hemiciclo del Parlamento y se disparaban salvas de ordenanza. Ha presenciado el acto el Gobierno socialista de José Sócrates y todos los diputados, junto con unos 900 invitados.

Entre los representantes de naciones de habla portuguesa, a quienes Cavaco Silva ha prometido cooperación, estaban los presidentes de Timor Oriental, Xanana Gusmao; Guinea Bissau, Nino Vieira; Cabo Verde, Pedro Pires; Mozambique, Armando Guebuza, y Santo Tomé y Príncipe, Fradique de Menezes, así como el primer ministro angoleño, Fernando dos Santos. La delegación de Brasil la ha presidido el ministro de Estado, Control y Transparencia, Wladir Pires.