Un alud de lodo a causa de las lluvias deja al menos 21 muertos en Guatemala

Al menos 21 personas murieron el pasado miércoles por la noche (hora local) en Senahú (Alta Verapaz, unos 230 kilómetros al Norte de Guatemala) cuando un cerro cedió a las lluvias que azotan la región y se derrumbó sobre el barrio de El Calvario de aquella población, sepultando varias viviendas.

Los equipos de rescate que han podido llegar al lugar continúan removiendo los escombros en búsqueda de supervivientes o víctimas, ya que se sabe que aún hay "un número todavía no determinado de desaparecidos". Unas 25 personas han sido rescatadas con lesiones de diversa gravedad y trasladadas en condiciones precarias al hospital de Cobán, la capital de la provincia.

Según declaraciones de Benedicto Girón, portavoz de la gubernamental Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred), las labores de rescate y ayuda se ven dificultadas porque la población ha quedado aislada y sólo se puede llegar a la misma por helicóptero. Los vecinos también han quedado sin servicios de agua potable y electricidad, lo que dificulta las comunicaciones con el lugar.

Al conocer la tragedia, el presidente guatemalteco, Óscar Berger, suspendió su agenda del día y voló al lugar, desde donde coordina las labores de auxilio. En breves declaraciones a una emisora de radio, Berger dijo que, como primera medida, se enviarán alimentos, prendas de abrigo y agua potable, "pues el lugar ha quedado completamente aislado".

Segunda tragedia

Es la segunda tragedia de la misma naturaleza que azota a esa barriada en los últimos cinco años. En junio de 2000 (en Guatemala, la época de lluvias abarca de mayo a octubre), una avalancha provocó la muerte de 15 personas.

En aquel momento, las autoridades intentaron convencer a los lugareños de la necesidad de abandonar la zona, pero se opusieron argumentando que lo que ganaban apenas les permitía comer y que no podían permitirse comprar nuevas tierras para vivir en ellas.

De forma que volvieron a levantar sus míseras chabolas en el lugar. Ahora, ante la catástrofe del pasado miércoles, las autoridades han anunciado que buscarán un terreno adecuado para proceder al traslado del barrio y que no permitirán que los pobladores permanezcan en un lugar de alto riesgo.

La desgracia parece haberse cebado contra los habitantes de Senahú. Esta misma semana, 17 vecinos de esa población murieron a consecuencia de un accidente de tráfico, provocado cuando el piloto del microbús que los llevaba adelantó en una curva y chocó frontalmente contra un voluminoso camión.