Un coche bomba deja cuatro estadounidenses muertos al oeste de Irak
Otros dos soldados fallecen al chocar dos helicópteros cerca de Bagdad
Cuatro soldados estadounidenses murieron ayer y otro más resultó herido por la explosión de un coche bomba conducido por un suicida en el oeste de Irak, ha informado hoy en un comunicado el mando de EE UU. El ataque se produjo al paso de un convoy militar estadounidense en la localidad de Al Qaim, cerca de Siria. Esta noche otros dos soldados han muerto al estrellarse dos helicópteros cerca de Bagdad.
El estallido en el que murieron los cuatro soldados causó la destrucción de los dos vehículos en los que viajaban. El ataque ocurrió horas antes de una oleada de explosiones que han acaecido esta mañana en cinco iglesias, un hospital y un hotel de Bagdad. Una persona ha muerto y nueve han resultado heridas por el impacto de morteros contra el hospital de Eben al Beitar, mientras que los otros ataques no han causado víctimas.
Esta noche se ha informado de que dos soldados estadounidenses han muerto y otros dos han resultado heridos al chocar dos helicópteros del Ejército de EE UU cerca de Bagdad.
Explosiones casi simultáneas
Las explosiones de la mañana se han producido en las iglesias de San José, en el barrio de Nafaq al Shurta; de San Jorge y San Jacobo, en Al Doura; de Roma, en Al Karrada; y de La Virgen María, en Al Mansour. Según el relato de fuentes de las iglesias, las explosiones han sido casi simultáneas, ya que se han prodcido con un intervalo de entre 10 y 30 minutos.
Esta ola de atentados es la segunda contra iglesias tras la del 1 de agosto, cuando estallaron varios coches bomba en cinco templos cristianos de Bagdad y Mosul, en el norte de Irak, que dejaron 11 civiles muertos y decenas de heridos. Los cristianos de Irak, cuya presencia tiene raíces muy antiguas hasta el punto de que ellos se definen como "hijos de Santo Tomás", son unos 800.000 por todo el país, lo que supone casi 3% de la población.
Por último, tres personas han muerto por la explosión de una bomba colocada en una carretera en la localidad de Mansuriya al Yabal, próxima a Baquba, a unos 90 kilómetros de Bagdad.
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