Al menos tres muertos en un atentado suicida contra un convoy militar canadiense en Kabul

Al menos tres personas, entre ellas un militar canadiense de la Fuerza Internacional de Ayuda para la Seguridad (ISAF), han muerto y otras 12 han resultaron heridas en un atentado suicida en Kabul, la capital de Afganistán.

Un portavoz de la ISAF ha confirmado que el atentado se produjoen una calle del noroeste de Kabul, a unos 15 kilómetros de la principal base, Warehouse, de la ISAF en la capital afgana, cuando una patrulla motorizada canadiense pasaba por el lugar.

Un suicida, con una bomba oculta, se acercó a uno de los tres vehículos de la patrulla canadiense e hizo explotar el artefacto, que causó heridas graves a tres de los militares norteamericanos y a una decena de civiles que se encontraban en el lugar. Uno de los soldados heridos y un civil afgano murieron posteriormente a consecuencia de las lesiones sufridas en el ataque. El terrorista falleció en el acto.

Pese a que la guerra afgana se libró en 2001, los ataques y atentados no cesan. En octubre pasado, dos soldados canadiense murieron al explotar un mina bajo su vehículo en Kabul y otros cuatro habían caído previamente en un bombardeo "por error" de aviones estadounidenses cerca de la ciudad de Kandahar. El atentado más grave sufrido por la ISAF fue un atentado en Kabul con un coche bomba contra un autobús de soldados alemanes. El ataque se produjo en junio y fallecieron cuatro militares germanos.

Desde su llegada a Afganistán a finales del 2001, las fuerzas de la ISAF, con mandato de la ONU y ahora bajo el control de la OTAN, se han encargado de la seguridad en Kabul, que se ha convertido en el único lugar relativamente seguro de Afganistán.

Desde hace unos meses, a propuesta de la OTAN y tras repetidas peticiones de la ONU y el Gobierno afgano, algunos pequeños equipos de soldados de la ISAF se han desplazado a algunas de las principales ciudades para formar el germen de nuevas unidades de seguridad.