Al menos siete muertos por el alud de lodo que sepultó dos campamentos en California

Al menos siete personas han muerto a causa del alud de lodo que sepultó el jueves pasado dos zonas de acampada en la zona de San Bernardino, al noreste de Los Ángeles, EE UU, han informado las autoridades locales. Los equipos de rescate buscan a otras nueve personas reportadas como desaparecidas, entre ellas varios menores y un niño de ocho meses, en los dos sucesos causados por las fuertes lluvias de los últimos días en California.

Las dos zonas de acampada están separadas por seis kilómetros, y sus campistas se vieron sorprendidos hacia el mediodía por el corrimiento de tierras causado por las precipitaciones en las laderas, cuya vegetación había sido consumida por incendios forestales hace dos meses. Cinco cuerpos han sido encontrados en el área del campamento de Santa Sofía, situado en el cañón Old Waterman, a unos 100 kilómetros de Los Ángeles.

Las víctimas eran, al parecer, familiares y amigos del vigía del campamento, Jorge Manzón, que también está entre los desaparecidos. De acuerdo con fuentes de la iglesia que administra el cámping, éste había sido cerrado para reparar los daños que causaron los incendios de hace dos meses.

Sepultados durante las celebraciones

Otras dos cuerpos, los de una mujer y un hombre, han sido encontrados en otro campamento en las cercanías de la localidad de Devore, en donde el corrimiento de tierras se produjo horas después que el de Santa Sofía. Las operaciones de rescate continúan, ha informado Chip Patterson, el jefe de policía de San Bernardino. "Seguiremos buscando hasta que encontremos más cuerpos o sobrevivientes".

Durante las operaciones del jueves, los equipos rescataron a 14 niños y adultos en la zona de Santa Sofía. Los rescatistas sospechan que la mayoría de los desaparecidos se encuentran atrapados en las cabinas de los vehículos de acampada, sepultados por el lodo cuando sus ocupantes se disponían a celebrar la Navidad.