Siete iraquíes mueren tiroteados por 'marines' en un control

Una nueva matanza en un control de carretera. Según la cadena de televisión estadounidense ABC, siete civiles iraquíes, tres de ellos niños, han muerto esta madrugada en un control de una carretera de Bagdad al ser tiroteado por marines el vehículo en el que viajaban. El Mando Central, establecido en Qatar, ha informado de que se está investigando este incidente.

Estas siete personas han perdido la vida cuando soldados del Quinto Regimiento de Marines han abierto fuego contra tres coches y un camión militar que parecían querer traspasar el control de carretera, en el sureste de Bagdad.

El incidente ha sucedido cuando un vehículo se aproximaba a la barrera del control sin detenerse. Los soldados han abierto fuego y matado un hombre. Después, cuando los soldados se han acercado a inspeccionar el cuerpo, ha aparecido un camión militar y, según la ABC, los marines han disparado también contra el camión, que ha volcado, y contra una furgoneta y un vehículo agrícola, en los viajaban los otros seis muertos.

"El peor día de mi vida"

Un periodista de la cadena de televisión ha informado de que los marines implicados se encontraban desolados. "Un 'marine' ha venido y me ha dicho: 'Es el peor día de mi vida'". El martes pasado, otros siete civiles perecieron cuando soldados estadounidenses que hacían guardia en un puesto de control dispararon contra el vehículo en el que viajaban después de que el conductor desobedeció las órdenes de detenerse. Esta nueva matanza ocurría en momentos en que el Pentágono informaba de que tres soldados fallecieron por la explosión de un vehículo en un puesto de control al norte del país, en la que también murieron una mujer embarazada y un hombre. Según Al Yazira, dos mujeres iraquíes participaron en este ataque.

Además, esta mañana el coronel Will Grimsley, comandante de la Primera brigada de la Tercera división de infantería ha informado de que otros tres soldados estadounidenses han perdido la vida "en un accidente de tráfico en su vehículo blindado" que se ha registrado cerca del aeropuerto internacional Sadam.

Y el Pentágono ha notificado hoy que ocho soldados estadounidenses murieron tras sufrir una emboscada por parte de una patrulla iraquí a finales de marzo. Estos militares se encontraban con Jessica Lynch, rescatada después de haber sido hecha prisionera en esta emboscada contra su convoy cerca de Nasiriya, el pasado 23 de marzo. Formaban parte de un grupo de militares de la 507 unidad de mantenimiento, una unidad logítica de Fort Bliss (Texas). Asimismo, nueve de los 11 cuerpos recuperados durante la operación de rescate de Lynch, llevada a cabo el pasado martes, pertenecen a militares estadounidenses.