La Casa Blanca incrementa el nivel de alerta ante el "alto riesgo" de ataques terroristas

El Gobierno de EE UU ha incrementado el nivel de alerta por el "alto riesgo" de que se produzca un ataque terrorista en territorio estadounidense, según han informado fuentes oficiales. Altos cargos de Washington se han reunido con el presidente Bush para expresarle sus temores.

Estos destacados miembros de su gabinete le han informado de la "existencia de amenazas terroristas creíbles, corroboradas en distintas fuentes".

Al hacer el anuncio oficial, el secretario de Justicia, John Ashcroft, ha añadido que las autoridades trabajan con la hipótesis de nuevos atentados de Al Qaeda contra "edificios de apartamentos o hoteles". El nivel de alerta ha pasado del amarillo al naranja, el segundo escalón de máxima alerta, que la Oficina de Seguridad Nacional vincula oficialmente a "un significativo riesgo de amenaza de acciones terroristas".

La última vez que se decidió elevar el nivel de alerta al código naranja fue en septiembre del año pasado, coincidiendo con el primer aniversario de los atentados del 11 de septiembre de 2001 y la comparecencia del presidente Bush en la Asamblea General de la ONU. Fuentes de la Casa Blanca han especificado que el "alto riesgo" de atentados detectados guarda relación también con la proximidad de la festividad musulmana del Haj peregrinación anual a la Meca).

En una escala de cinco colores, el amarillo se activa ante un riesgo "significativo" y el naranja ante un riesgo "alto". El color rojo está reservado para una amenaza "severa".

Amenazas fuera de EE UU

La decisión de la Casa Blanca se ha dado a conocer un día después de que el Departamento de Estado alertara públicamente del riesgo de acciones terroristas con armas químicas y biológicas contra ciudadanos civiles y militares estadounidenses en todo el mundo.

En el aviso se ha recordado a los ciudadanos estadounidenses "la necesidad de seguir vigilantes, debido a la creciente amenaza de ataques terroristas que pueden tener como objetivo a civiles, incluyendo la posibilidad de ataques con armas no convencionales".

"Los intereses y los ciudadanos de EE UU corren un alto riesgo de sufrir ataques terroristas por parte de grupos vinculados a Al Qaeda. Las acciones pueden incluir (...) operaciones suicidas, asesinatos y secuestros", ha alertado el Departamento de Estado.

Según este aviso publico, "el uso terrorista de armas no convencionales, incluidos agentes químicos y biológicos puede ser considerado una amenaza creciente".