La OTAN culmina los preparativos de su operación 'Cosecha esencial'
A pesar de la persistencia de los enfrentamientos hoy, la organización considera que el alto el fuego se está cumpliendo
La OTAN ha puesto cuatro condiciones para iniciar esta operación, que implicará a unos 3.500 soldados de la Alianza Atlántica: la conclusión del acuerdo político, el respeto a un alto el fuego, la firma de un acuerdo técnico entre la OTAN y el Gobierno y la elaboración de un plan que precise la recogida de armas.
Pero pese a la firma de este acuerdo, destinado a poner fin a siete meses de conflicto armado entre los rebeldes albaneses del Ejército de Liberación Nacional (ELN) y fuerzas gubernamentales, los enfrentamientos continuaron hoy, en un ataque del ELN a posiciones gubernamentales en los alrededores de Tetovo (noroeste), así como en el norte de Skopje.
Esto no ha impedido que el secretario general de la OTAN, George Robertson, estimase que "la segunda condición, el respeto de un alto el fuego, parece también haberse cumplido".
La tercera condición, igualmente conseguida, era la firma de un acuerdo técnico entre la OTAN y el Gobierno macedonio que defina el marco jurídico del despliegue de las tropas de la Alianza en Macedonia.
Cosecha esencial
La cuarta condición, la elaboración de un plan que precise, con el acuerdo de los beligerantes, las modalidades de la recolección de las armas se ha cumplido esta misma tarde con la firma de un acuerdo entre la OTAN y el ELN por el que la guerrilla rebelde se compromete a entregar sus armas.
Quince expertos militares de la OTAN trabajaban desde esta mañana para marcar los puntos donde se recogerán las armas y definir los aspectos logísticos de esta operación,
bautizada Cosecha esencial. Robertson ha señalado que la fuerza de la OTAN no será una fuerza de mantenimiento de la paz y que su papel consistirá en recoger las armas entregadas voluntariamente por los rebeldes.
Las tropas de la OTAN no se desplegarán hasta que la Alianza no esté segura de que el alto el fuego es "duradero" y que los rebeldes, que se entrevistaron con representantes de la OTAN, no están preparados para rendirse sin combate. Esta operación no debería comenzar hasta finales de esta semana o quizás a principios de la siguiente.
Una vez aprobado este plan por las diferentes partes, los responsables políticos de la Alianza deberán aún esperar la evaluación que hará el comando militar de la OTAN de la situación en el terreno, después de lo cual se aprobará definitivamente la operación. Esto sí que podría realizarse en los próximos días.
Los primeros soldados de la OTAN podrían ser desplegados en Macedonia 48 horas después de tomarse la decisión definitiva. El conjunto de las tropas estaría operativo en un plazo de dos semanas.
De acuerdo a lo decidido el pasado mes de junio por la Alianza, la recolección de armas y de municiones debería durar aproximadamente un mes, pero no se excluye que la misión pueda ser prolongada.
La OTAN ha confirmado hoy la reunión que mantendrán mañana los 19 embajadores del Consejo del Atlántico Norte (NAC) en Bruselas, durante la cual estudiarán la situación en Macedonia y, eventualmente, decidirán el lanzamiento de esta operación.
Durante esta reunión, los embajadores deberán disponer del conjunto de informaciones necesarias para decidir el lanzamiento de la operación, pero algunos representantes podrían aún informar a su capital respectiva, precisó la OTAN.
Soldados españoles
Desde el pasado mes de junio, España ha mostrado su disposición a formar parte de esta operación con más de un centenar de efectivos.
Según han precisado fuentes de Defensa, el envío de soldados a la zona debe ser autorizado, una vez realizada la petición de la OTAN, a través de una decisión del Consejo de Ministros, cuya próxima reunión no tendrá lugar hasta el 31 de agosto, dado el periodo vacacional.
El pasado 20 de junio, el ministro de Defensa, Federico Trillo-Figueroa, anunció que España había mostrado su disposición a participar en la brigada internacional que el Consejo Atlántico estudiaba enviar a Macedonia.
El ministro apuntó entonces que Defensa había puesto a disposición de la OTAN efectivos españoles destacados ya en Kosovo y, "si fuera necesario", en Bosnia-Herzegovina, si lo que la Alianza Atlántica pretendía era envíar unidades que ya tuviera experiencia en la zona de los Balcanes.
En tal caso, dijo Trillo, el Ejecutivo proporcionaría "el consiguiente apoyo logístico" y repondría en los Balcanes "aquellos destacamentos" que fueran "trasladados para formar la nueva brigada que la OTAN piensa enviar a Macedonia".
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