El IRA reanuda los contactos de paz con la Comisión Internacional de Desarme
Tony Blair se reúne hoy en Belfast con el primer ministro irlandés Bertie Ahern, con el unionista David Trimble, con el nacionalista Seamus Mallon y con el líder del Sinn Fein, Gerry Adams
El anuncio se produce poco antes de que el primer ministro británico, Tony Blair, se reúna hoy en el castillo de Hillsborough, en Belfast, con su colega irlandés, Bertie Ahern, con el ministro principal norirlandés, el unionista David Trimble, y con el viceministro principal, el nacionalista Seamus Mallon. También lo hará con Gerry Adams, líder del partido republicano Sinn Fein, el brazo político del IRA.
Según la organización terrorista, que mantiene el alto el fuego declarado en julio de 1997, el Gobierno británico no parece dispuesto a mantener los compromisos que hizo en los últimos años, lo que ha calificado de "totalmente inaceptable". No obstante, los terroristas subrayan que el grupo mantiene su compromiso de buscar una paz duradera en el Ulster, aunque puntualiza que sólo se conseguirá si todas las partes contribuyen a ello.
El proceso de paz afronta en estos días dificultades por las diferencias entre los partidos sobre el desarme, la reforma de la policía norirlandesa y la desmilitarización del Ulster. De todos esos asuntos, el que se presenta como más espinoso es el desarme, debido a la continua exigencia del mayoritario Partido Unionista del Ulster (UUP) a que haya entrega de armas del IRA.
La organización terrorista ha aceptado que observadores internacionales tengan acceso a sus depósitos de armas para demostrar que están inutilizadas, pero nunca ha hablado de entregar sus arsenales o explosivos.
El comunicado íntegro del IRA
"El liderazgo de Oglaigh na h-Eireann (IRA) ha recibido información detallada sobre las intensas negociaciones que han tenido lugar en las últimas ocho semanas.
La posición del Gobierno británico refleja que no está preparado para cumplir con los compromisos que ha hecho en los últimos años. Esto es totalmente inaceptable para el IRA.
Pese a ello, el liderazgo mantiene su compromiso de buscar una paz duradera en nuestro país. Esto sólo se podrá lograr si todo el mundo contribuye a ello.
En años recientes, Oglaigh na h-Eireann ha participado en una serie sin precedentes de iniciativas significativas e históricas para impulsar el proceso de paz, incluso manteniendo un cese (de atentados) durante siete años, una observación regular de los depósitos de armas por parte de inspectores internacionales y un compromiso para la creación de un futuro en el que las causas del conflicto sean resueltas por medios pacíficos.
Para demostrar la seriedad de nuestro compromiso, y pese a la posición del Gobierno británico, el liderazgo del IRA ha decidido entrar en nuevas conversaciones con la IICD (Comisión Internacional Independiente del Desarme).
Esto se hará sobre la base del compromiso del liderazgo del IRA para resolver el asunto como estaba contenido en nuestro comunicado del 6 de mayo de 2000 y sobre otros principios.
Para que esta participación tenga éxito, el Gobierno británico tiene que cumplir con sus obligaciones. Tiene que cumplir con el acuerdo del 5 de mayo de 2000.
En ese entonces, los dos Gobiernos (británico e irlandés) expresaron el compromiso, en una carta y en una declaración conjunta, sobre el pleno cumplimiento del acuerdo del Viernes Santo (de abril de 1998) para junio de 2001.
El Gobierno británico se ha comprometido pública y en forma privada a afrontar una serie de asuntos, como los derechos humanos, la igualdad, la Justicia, la desmilitarización y la (reforma de la) policía.
Se demuestra hasta ahora que el IRA ha honrado cada compromiso que ha hecho, incluso la apertura de los depósitos de armas del IRA a los inspectores internacionales, Cyril Ramaphosa (sudafricano) y Maarti Ahtisaari (finlandés).
Lo hemos hecho a pesar del abuso que ha sufrido el proceso de paz por parte de quienes se empeñan en derrotar al IRA y a los republicanos irlandeses y el fracaso obvio del Gobierno británico para cumplir con sus obligaciones.
La responsabilidad política para hacer avanzar la actual situación recae en los dos Gobiernos, especialmente en el Gobierno británico y en el liderazgo de los partidos políticos".
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