Entre el campo y la ciudad: así son las prendas que vestiremos en 2021

Nunca el contexto había influido de forma tan inminente en nuestro vestuario. Desde que nuestra casa se convirtió en el centro de nuestra vida, nuestro armario ha ido adaptándose a las nuevas exigencias. La comodidad elevó la ropa homewear a la categoría de tendencia, con básicos y prendas deportivas entremezclándose hasta formar el uniforme oficial de 2020. Al mismo tiempo, el ansia de escapismo sirvió para dar rienda suelta al fenómeno cottagecore y el nórdico friluftsliv (lo que vendría a ser la versión para exteriores del escandinavo hygge), una reconciliación con el aire libre, con la naturaleza como aspiración estética.

Ambas corrientes encuentran el equilibrio en la primera propuesta unisex de Uterqüe, 0.0 Studio, una colección cápsula de venta exclusiva online, con la que la firma vuelve a sus orígenes (uterqüe en latín significa ambos). Compuesta de prendas esenciales y patrones oversize, la propuesta aúna la estética urbana y deportiva con unos códigos más relajados y orgánicos. Esa unión se evidencia en las prendas estrella de la línea, como un chaquetón guateado de doble faz, confeccionado con una parte externa de lana y una parte interna en tejido técnico. Una sola pieza con dos formas totalmente distintas de vestirla: en clave clásica, con la tela en un discreto azul marino y ribetes más claros, o con la cara naranja neón para los días más atrevidos.

La pareja más icónica y con más personalidad de Internet, el diseñador australiano Justin O´Shea y la modelo alemana Veronika Heilbrunner, ponen a prueba la versatilidad de esta nueva colección. En la campaña, ambientada en la bucólica campiña, hay abrigos de corte recto, plumíferos funcionales repletos de bolsillos o camisas oversize, que tanto pueden llevarse solas como a modo de sobrecamisa... prendas que abrazan la androginia y pasan del uno al otro para formar un armario compartido.

Uterqüe se adentra por primera vez en el armario masculino, reivindicando los códigos inconfundibles de la marca desde su creación en 2008: las siluetas atemporales y la calidad de los materiales. Así, los pantalones de lana están confeccionados en tejido italiano procedente de la prestigiosa casa Marzotto, mientras que la tela y confección de las camisas llevan sello made in Spain y las sudaderas están elaboradas con algodón 100%.

El mimo artesanal se materializa en cada prenda, como un fabuloso abrigo verde confeccionado con una técnica de puntada manual. En los accesorios se evidencia todavía más el respeto por los detalles: en los bolsos, confeccionados con nylon de los mejores proveedores, la mochila con el forro a contraste o la riñonera con detalles en los tiradores.

Mención aparte merecen las zapatillas deportivas, de edición limitada, las únicas creadas ad hoc para hombre y mujer. Los modelos, eso sí, comparten rasgos en común: una silueta inspirada en los modelos running de los noventa, con una suela contundente y llamativa, y un upper en el que conjugan con maestría materiales y colores.

La paleta cromática conecta con la naturaleza y hace alarde de optimismo. Son colores llenos de vida –naranjas, verdes, azules...– que todavía adquieren más fuerza cuando tiñen los accesorios. Los calcetines verdes y naranjas, confeccionados con cashmere, son esa apuesta segura apta para tímidos; mientras que la bufanda naranja está a punto de convertirse en un best seller de la firma.