Menú semanal de El Comidista (6 al 12 de febrero)

Pocos alimentos nos da el mar que nos pongan tan palotes como los mejillones: son baratos, versátiles y muy sabrosos. 

Si te preocupan mucho las lorzas, tranquilidad: también hay la opción de hacerlas al horno, tal como aparecen en la foto.

Aprovechemos el maldito frío para abrigarnos el estómago y comer tarta sin remordimientos: lorcitas del futuro con capa crunchi-crunchi.

Aquí tienes los secretos para alcanzar el éxtasis con este aperitivo de Oriente Próximo: haz hummus, no cemento. 

La versión que os proponemos lleva puerro, un ingrediente que no aparece en la receta original –en teoría se hace con ajo– pero que le da mucha melosidad. 

¡Qué injusto! Relegado desde los años ochenta a la categoría de desayuno de dieta por su punto amargo y su ligereza. ¿Lo has probado asado?

Si no te gusta esta combinación de alcachofas, caldo vegetal, menta y pasta es que no tienes corazón (o que eres la reencarnación de Mafalda). 

¿Existe algún ser humano (normal) al que no le gusten las croquetas? Seguramente no, y por eso revelamos sus normas básicas.

Cuando les pilléis el rollo, jugad con ellas y añadidles vuestros sabores favoritos: vainilla, canela, cardamomo, ralladura de piel de naranja o pimienta.

Una receta literaria y fabulosa para rendir homenaje a Pepe Carvalho, el detective gastrónomo, y a su creador Manuel Vázquez Montalbán. 

Como todos los cebiches simples, no tiene más misterio que el de encontrar un buen pescado y no pasarse con el tiempo de macerado.

Es un alimento tan maravilloso que casi podría suplir a todas las demás frutas: jugosa, dulce, nada empalagosa, cargada de toneladas de vitamina C.

Si quieres cerdear, añade al cocido un poco de bacon o de panceta previamente desengrasados en una sartén caliente.

Estas pechugas llevan dentro tres de las cosas que más nos gustan en el mundo: tomates secos, piñones y salvia. 

A veces el orden de los factores altera el producto, y una misma receta puede dar distintos resultados. Di adiós a la casualidad y saluda a la ciencia.

Este puré es perfecto para estos días de detox y culpa por su sabor festivo y la ligereza de todos sus ingredientes. 

Sí: la pepitoria es de esas recetas más viejas que Carracuca que necesitaba una urgente reivindicación. 

Las alcachofas empiezan su temporada triunfal, así que ha llegado el momento de festejarlas como las reinonas del invierno que son.

Todos los que hagan esta receta con merluza congelada o aceite de garrafón pasarán 20 años en el purgatorio.

Es mejor consumirla pronto por su caducidad, y si viene del quinto pino el transporte puede afectar a sus características.