Menú semanal de El Comidista (20 a 26 de julio)

Este aperitivo típico de Mediterráneo árabe mejora su sabor cuando lo preparamos directamente a la llama, tiene infinitas aplicaciones y está tan bueno que lo adoptarás como fondo de nevera.

Chile en lugar de mostaza, pepino y cebolla roja marinados en lima, totopos para acompañar y un poco de cilantro picado: llevar un tartar de viaje a México es más fácil -y barato- que comprarse un billete a Tulum.

La alternativa imberbe al melocotón obra milagros con la vainilla. Esta receta es tan fácil que roza el 'jetapostrismo'.

El gazpacho es una de las sopas frías más típicas del verano. Si le añadimos una fruta tan de esta época como el melocotón, el resultado es más veraniego que un balón de Nivea.

Pasta parece, calabacín es: unos 'calabaguetis' fríos con un pesto ligero que te reconciliarán con la mandolina y te harán descubrir una nueva manera de zampar verdura perfecta para el verano.

El melón es tu amigo durante el verano y se supone que, si huele, pesa y la base cede un poco al apretarla, estará bueno. Pero no es una ciencia exacta.

Las judías verdes no solo pueden tomarse calientes. En ensalada y cocinadas al punto dan un toque crujiente y fresco a esta receta, que se viene arriba gracias al aliño de mostaza casera de manzana.

Unas patatas crujientes, cocidas y cocinadas al horno, acompañadas de una salsa de tomate dulce, ácida y llena del aroma y sabor de las especias. Que, además, se prepara en muy poco tiempo.

¿Icono viejuno por excelencia o clásico contemporáneo? La tarta de galletas y chocolate, antaño estrella en las fiestas de cumpleaños infantiles, merece una nueva oportunidad.

¿Buscas un entrante sano, fresco, rico y muy fácil de hacer? Pues aquí lo tienes, 100% libre de animalitos y listo para que te lo comas a cubos. Y encima es de color rosa, que siempre es un plus.

Estamos en temporada de bonito, y eso en el País Vasco se celebra de la mejor forma posible: con un buen marmitako.

Debe tener una mancha amarillenta en la zona que ha estado en contacto con la tierra, y al darle golpecitos con los dedos se debe "sentir hueca".

El albaricoque es una de las frutas que menos utilizamos para cocinar, y nos lo estamos perdiendo. Porque a mordiscos está muy rico, pero acompañado de tomate, feta y un aliño fresco directamente es la bomba.

Un entrante que no empapuza a base de langostinos con una salsa aromática de aire tailandés. Se prepara en cuestión de minutos y tiene un coste más que razonable.

Estos 'jetapolos' de fruta son perfectos para rechupetearlos sin que te confundan con un oso y refrescarte al mismo tiempo. Solo necesitas un congelador y dos manitas para hacerlos.

Aprovechamos la temporada de ciruelas para usarlas en una receta salada con unos jugosos contramuslos de pollo. Puedes ponerle patata, boniato o servirlo sobre una base de arroz o cuscús: triunfarás seguro.

Son suaves, tiernos, jugosos y muy aromáticos cuando están en su punto óptimo. Si te aburres de comerlos solos siempre puedes hacer clic en el enlace y probar alguna de las recetas.

Estos panecillos con verduras le darán a tu barbacoa el toque verde y caramelizado que necesita. Que no todo va a ser ponerse tibio a chorizos, salchichas y alitas.

El resultado es crujiente por el cereal, gomosillo por el mazapán y jugoso por la pera. O sea, un escándalo.

Nada evoca unas vacaciones en esa playa paradisíaca como un cóctel (más o menos) polinesio. Es la hora de coger el pareo y volar a Honolulu con la ayuda del ron, la lima y el curaçao.

Pincha en el enlace y descárgate la plantilla de menú semanal de El Comidista. Podrás organizarte los desayunos, almuerzos, meriendas y cenas de toda la semana.