El Gobierno de Ayuso cesa a dos altos cargos de Educación y a uno de Digitalización

El consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid, que preside Isabel Díaz Ayuso, ha decidido este miércoles tres nuevos ceses: el de Silvia Roldán como Viceconsejera de Digitalización; el de Eva María Borrego como Directora General de Educación Infantil, Primaria y Especial; y el de Milagros de Pedro Conal como Directora de Área Territorial de Madrid-Este. Las destituciones no han sido mencionadas por el portavoz del Gobierno, Miguel Ángel García Martín, durante la rueda de prensa destinada a repasar los acuerdos adoptados en la reunión, ni han sido aclaradas luego en sus razones de fondo por el ejecutivo. Pero dos cosas son seguras: igual que la salida de Roldán cercena aparentemente una trayectoria que parecía en ascenso, pues su anterior responsabilidad había estado al frente del Metro de Madrid, las de Borrego y De Pedro profundizan la inestabilidad en la que está instalada la consejería de Educación.

Desde que Emilio Viciana fue seleccionado como consejero de Educación por Díaz Ayuso, hace un año, ha prescindido de estos dos cargos, del viceconsejero de Política Educativa, o de la Directora General de Investigación e Innovación Tecnológica, según documentación pública consultada por este diario. A esto se unen los cinco ceses decididos nada más llegar al cargo, en julio de 2023, explicables en el contexto de la renovación total del ejecutivo que decidió la presidenta.

Según una fuente que interactúa frecuentemente con Viciana y sus altos cargos, esos cambios en los responsables de cada área están relacionados con la renovación de un equipo que en varios casos había sido heredado del anterior consejero, Enrique Ossorio, así como con la fusión de dos viceconsejerías. Las modificaciones de personal se unen, además, a múltiples polémicas relacionadas con la cartera de Educación.

Así, la trayectoria de Viciana en el Gobierno ha estado llena de baches, lo que no ha pasado desapercibido para los principales asesores de la presidenta regional, que por ahora ha rechazado en público la posibilidad de abrir una crisis de Gobierno para rediseñar la alineación de consejeros.

La lista de polémicas es larga: del frenazo al bilingüismo en los estudios de Historia, a la marcha atrás en el proyecto de instalar una Escuela Europea Acreditada dentro del Ramiro de Maeztu, pasando por el caos en la gestión de las becas comedor del curso pasado, que obligó a darle la ayuda a todos los solicitantes, cumplieran los requisitos o no, lo que provocó un sobrecoste de 17 millones de euros.

¿Y la salida de Roldán? “Responde a los ajustes que se están haciendo en las consejerías en el marco del normal funcionamiento de los departamentos”, dijo un portavoz gubernamental sobre la destitución de la viceconsejería de Digitalización, que antes se desempeñó como Consejera Delegada de Metro de Madrid entre 2019 y 2023, y que ahora ha sido sustituida por Manuel Pérez.

El área de Digitalización, que es una apuesta personal de la presidenta, tampoco ha estado exenta de polémica. En febrero, el Gobierno fichó para la agencia de ciberseguridad, y destituyó, en apenas unas horas, a un general jubilado de la Guardia Civil salpicado por el ‘caso Zabalza’.

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