El festival Brava Madrid cobra hasta 10 euros por usar un servicio de autobús que el Ayuntamiento anunció como gratuito

Entre el viernes y el sábado, se celebró en la capital un festival de música pop y electrónica, el Brava Madrid. El recinto de conciertos se ubicó en Ifema y, para llegar y volver, los asistentes tenían tres opciones: en coche privado, en metro o en autobús. Esta última fue la más demandada de madrugada, cuando ya habían terminado las actuaciones, porque el metro estaba cerrado. La EMT puso en marcha un servicio especial de lanzadera gratuita entre el recinto ferial y Plaza de Castilla ―de medianoche a 3.00 el viernes y de 1.00 a 4.00 el sábado―, para facilitar el regreso, y así lo anunciaron en su página web. Pero resultó no ser gratis. La empresa que organizaba el evento obligó a pagar entre 8 y 10 euros a los asistentes para que pudieran subir a los autobuses, como ha adelantado cadena SER. El Ayuntamiento de la capital asegura que abrirá un expediente informativo para esclarecer lo ocurrido mientras que la promotora del festival afirma, en un comunicado publicado este lunes, que pagó una “cantidad económica” a la EMT por la prestación del servicio.

Rober Álvarez, de 33 años, y sus amigos salieron del recinto del festival el viernes a la una y media de la mañana. Se dirigieron al metro, pero ya estaba cerrado. “Vimos que había unos autobuses municipales en los que se leía ‘SERVICIO ESPECIAL Plaza Castilla’. Sabíamos que había un autobús privado del festival, porque nos bombardearon a correos los días previos, para que comprásemos la pulsera del autobús por ocho euros más gastos de gestión [un euro]. En su momento no nos interesó, porque por ese dinero nos salía mejor un taxi, pero al ver el autobús de la EMT decidimos cogerlo. Iba lleno y no hubo problema”, cuenta. Supusieron que el vehículo por el que la empresa cobraba era otro ―en la web presentaban un autobús blanco y rosa― y que este era un servicio municipal extra, habitual cuando hay eventos multitudinarios de este estilo. De hecho, el fin de semana hubo conciertos en la Universidad Complutense y también se puso en marcha una lanzadera gratuita.

Como Álvarez, muchos otros asistentes que el viernes accedieron a los autobuses y los propios conductores les indicaron que no había problema y era gratuito. Pero el sábado, la cuenta de X (antes Twitter) del festival publicó lo siguiente: “Hemos tomado nota de vuestros comentarios y esta noche reforzaremos el control de pulseras para que solo se puedan subir las Bravas previsoras que tengan su pulsera de Bus. Los buses son buses generales de la EMT, la parada está justo fuera del metro de Feria de Madrid”.

Álvarez se extrañó, porque la propia EMT había anunciado que la lanzadera entre Ifema y Plaza Castilla sería gratuita. El sábado, como el día previo, se acercó a uno de los autobuses, que no eran rosas, sino azules, como todos los interurbanos municipales. “Había una persona de seguridad privada controlando el acceso y dejando en la calle a todo aquel que no llevase la pulsera [que se daba a los usuarios que pagaban la tarifa de ocho euros]”, relata.

Consultó la web del festival y, para su sorpresa, ya no costaba ocho euros, sino 10, porque las más baratas se habían agotado. “Fueron a denegarme el acceso y dije que no podían, que era un autobús municipal. El de seguridad me dijo que sí, que era un autobús municipal, pero el servicio lo había contratado con la EMT una empresa privada”, sigue Álvarez. Entonces, le mostró un pantallazo con el anuncio de la entidad municipal. Solo así le dejaron pasar. “Siguieron impidiendo el acceso a las personas sin pulsera que venían detrás”.

Irene Madrid, de 27 años, sí pagó ocho euros ―más uno de gestión― por la pulsera. Sobre las dos de la madrugada del viernes fueron hacia el autobús. “Llegando ya a la cabecera para subir, nos encontramos con un trabajador de la EMT bastante enfadado, diciendo que los autobuses eran gratuitos. Le enseñamos la pulsera específica del autobús y el hombre no entendía nada”, explica.

El relato de Mario Montes, que optó por no pagar al haber visto antes el anuncio de la EMT, es similar: el viernes prácticamente todo el mundo entró sin problema en los autobuses municipales y el sábado la empresa reforzó los controles con personal de seguridad. “Había gente a la que le decían que sin pulsera de bus no podían subir y no lo pelearon y se fueron. Los que sí lo pelearon les dejaron subir finalmente”, explica. El resultado: decenas de quejas en redes sociales de asistentes que exigen que les devuelvan el dinero.

La empresa promotora del festival es The Music Republic, que organiza un segundo evento este fin de semana, Madrid Salvaje, y para el que también anuncian un servicio de lanzadera por ocho euros. Un portavoz de la empresa, preguntado por los cobros, remite al comunicado que han publicado en las redes de Brava Madrid. “La organización de Brava Madrid quiere aclarar que existe un contrato firmado entre la promotora y la EMT en el que se constituye la prestación de un servicio especial de transporte regular en autobús por parte de la EMT”, indica en el texto y añade que en ese contrato figura que la promotora ha abonado una “cantidad económica”, que no revelan, a la entidad municipal: “Por lo que no es un servicio gratuito tal y como ha publicado la EMT en sus medios oficiales en lo que ha podido ser un fallo en la comunicación”.

La promotora también señala que no pueden facilitar “cierta información por ser interna”, pero sí afirman que “el coste del acuerdo con la EMT por el servicio de buses ofrecido es mayor que la facturación que ha recibido la promotora por la venta de los buses lanzadera”. El porcentaje de público que ha adquirido el servicio en ambos festivales “no llega apenas al 4%”.

Una portavoz del área de Movilidad del Ayuntamiento afirma que “han analizado el plan de movilidad y se ha constatado que la organizadora del evento contrató el servicio del autobús de la EMT y puede repercutir el coste al usuario”. Aun así, consideran que “el precio cobrado es abusivo” y han abierto un expediente informativo para “valorar las consecuencias del cobro y adoptar las medidas necesarias en caso de incumplimiento del plan de movilidad”. “Es la primera vez que el Ayuntamiento de Madrid tiene constancia de un hecho así e informa de que, desde ahora, con carácter generalizado ante cualquier evento que incluya en su plan de movilidad servicios de autobús de la EMT autorizados por el CRTM serán gratuitos para los usuarios”, añade.

Por su parte, el concejal del área, Borja Carabante, ha señalado que “por supuesto” van a tomar medidas y que el plan de movilidad contemplaba un servicio especial de la EMT, sufragado por la empresa. “El servicio especial de la EMT no tiene coste para la EMT ni para el Ayuntamiento, sino que tiene coste para los promotores del evento. En ese plan de movilidad existía la posibilidad de que pudieran comercializarlo”, ha respondido a las preguntas de los periodistas este lunes, y ha añadido que el martes van a convocar a la promotora y los servicios técnicos de la entidad municipal para esclarecer lo ocurrido y que en el siguiente festival la lanzadera sea gratuita.

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