La manifestación del Orgullo se celebrará el 3 de julio sin carrozas ni escenario

Este año sí que habrá manifestación física del Orgullo tras la celebración virtual del año pasado por la pandemia, pero no tendrá nada que ver con las de siempre porque no habrá ni una sola carroza ni tampoco escenario para los discursos finales con el fin de respetar las medidas de prevención frente a la covid-19, Así lo han acordado este martes los organizadores del Orgullo LGTBI con la Delegación del Gobierno en Madrid. La marcha ha sido convocada el sábado 3 de julio bajo el lema Los derechos humanos no se negocian, se legislan: Ley Integral Trans Ya.

La manifestación saldrá a las ocho de la tarde de la glorieta de Carlos V (la de Atocha) y acabará en la plaza de Colón, informan en un comunicado la Federación Estatal de Lesbianas, Gais, Trans y Bisexuales (FELGTB), Cogam, el Colectivo LGTB+ de Madrid y otras entidades organizadoras del Orgullo Estatal.

Tras reunirse este lunes con la Delegación del Gobierno, explican, se ha apostado por un formato muy diferente al de otros años para garantizar “un Orgullo seguro y responsable”. “Somos conscientes de lo frágil que es la situación sanitaria todavía, por eso convocamos una manifestación distinta a las celebradas hasta ahora, en la que se pedirá responsabilidad a la ciudadanía y que se respeten las medidas de seguridad, la distancia social y el uso de la mascarilla”, subraya la presidenta de FELGTB, Uge Sangil.

Según su homóloga de Cogam, Carmen García de Merlo, la pandemia, el ascenso de la ultraderecha y el incremento de los discursos de odio han agravado las situaciones de vulnerabilidad que afrontaban las personas LGTBI y, en especial, las trans, y es necesario salir a la calle para exigir que cese esa violencia y se aprueben soluciones legislativas que los protejan. Este año se centrarán en las personas trans y pedirán una legislación que garantice el derecho a la libre autodeterminación de género, el derecho de una persona a que se atienda su voluntad de cambiar su sexo en el Registro, sin necesidad de informe médico o psicológico.

La ley trans que quería impulsar el Ministerio de Igualdad con ese objetivo se encuentra bloqueada ante las discrepancias con la Vicepresidencia Primera, que recela de la libre autodeterminación del género. Sangil y García de Merlo recuerdan que la ley fue un compromiso del actual Ejecutivo y denuncian el “bloqueo ideológico generado por parte de este mismo Gobierno, que impide su tramitación”.

“No podemos permitir por más tiempo este estancamiento basado en argumentos que contradicen las recomendaciones de la Unión Europea y de Naciones Unidas en materia de derechos humanos”, subrayan. La abstención del PSOE impidió el pasado 18 de mayo que el Congreso comenzara a tramitar una ley trans impulsada por ERC y otros grupos, posición que ha llevado este martes a 70 organizaciones, como la Federación Plataforma Trans, a pedir a los organizadores del Orgullo que no inviten a los dirigentes socialistas.

La portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, ha afirmado este martes que no sería “justo ni inteligente” que la comunidad LGTBI cargue contra el PSOE por este asunto. Tras el Consejo de Ministros, Montero ha recordado que el Gobierno y las fuerzas políticas que lo componen son formaciones “históricamente comprometidas” con el reconocimiento de derechos y la posibilidad de ejercerlos.” Nuestro compromiso con el colectivo LGTBI es total, lo ha sido siempre”, ha defendido Montero, que ha recordado que el PSOE “ha liderado los avances normativos” que han permitido a este colectivo el reconocimiento de sus derechos.

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