El mayor número de brotes de covid en Madrid se da en el ámbito social

Las reuniones sociales, el lugar de trabajo, los centros sociosanitarios y el ámbito familiar. Esos son, y en ese orden, los lugares donde se registra el mayor número de brotes por coronavirus en Madrid. La Comunidad, que publica por primera vez el desglose de espacios donde se producen las infecciones, suma 1.340 brotes fuera del hogar desde la primera semana de julio —cuando comenzó la notificación a escala nacional— y 236 en el ámbito familiar. A la primera categoría se atribuyen 12.776 contagios, a la segunda, 1.089. Estos datos solo aportan información sobre 13.865 contagios, el 2,8% de los 482.768 que se han producido desde el 29 de junio.

“La mayoría [de los brotes] se da en el ámbito familiar”, ha sido la respuesta oficial repetida una y otra vez por la Comunidad de Madrid, desde el pasado verano, a la pregunta sobre dónde se estaban produciendo principalmente las infecciones. Aunque nunca ha aportado cifras que respaldaran esa afirmación y ha sido en esa hipótesis en la que las autoridades autonómicas han basado las medidas y restricciones que han tomado desde que arrancó la segunda ola, a finales de julio. Madrid es desde la desescalada una de las comunidades más permisivas en la apertura de establecimientos públicos; este mismo jueves está previsto que se retrase una hora el toque de queda y se amplíe el horario de los locales.

“El porcentaje más importante es el que no se especifica”, apunta el epidemiólogo Fernando García, de la Asociación Madrileña de Salud Pública: “Aquí [dice respecto al informe] solo se habla de brotes”. Brote es, según indica el boletín, “cualquier agrupación de tres o más casos con infección activa en los que se ha establecido un vínculo epidemiológico”. Y, según los protocolos vigentes, “los que únicamente afectan a los convivientes habituales de un mismo domicilio, salvo que tengan características especiales o que se expandan a nuevos ámbitos, no se comunican a nivel nacional, por lo que se contabilizan de forma independiente en todos los informes”.

¿Qué ocurre entonces con los 469.992 casos que no están asociados a ningún brote desde el verano? “La trazabilidad hay que hacerla en todos los casos, o debería hacerse, porque si sabes quién te contagió, puedes actuar sobre el contagiador, además de los contactos estrechos, para ver si esos se convierten en casos”, explica García. Hasta la pasada semana, la trazabilidad que presentaba la autonomía apenas superaba el 15%, según los datos semanales enviados al Ministerio de Sanidad.

El 11 de febrero, fecha del último informe del Gobierno central sobre los principales indicadores de seguimiento de covid por autonomías, Madrid elevaba ese porcentaje hasta un 32,5%. Es decir, que conoce el origen de tres de cada diez nuevas infecciones. El porcentaje óptimo en esta variable, según los niveles de riego que el ministerio estableció con las autonomías el pasado otoño, “es por encima del 80%”, recuerda el epidemiólogo: “Muy lejos de las cifras de Madrid, y no hay prácticamente ninguna comunidad que alcance ese porcentaje”. Lo hacen Canarias (87,9%), Ceuta (87,5%) y La Rioja (82,2%). Después de esa horquilla, “el nivel bajo de riesgo es entre el 65% y el 80% y el riesgo alto va entre el 30% y el 50%, que es el nivel en el que se mueve Madrid”, puntualiza el experto.

Ahora, los datos del boletín epidemiológico semanal que publica la Comunidad cada martes por la noche indican que la inmensa mayoría de los brotes, al menos aquellos registrados y cuyo origen logran determinar los rastreadores, tiene su origen fuera de los hogares. Pero esto, insiste García, “no es representativo”. Es lo que se llama sesgo de selección: “Solo una muestra pequeña que no es representativa del conjunto. Aquí, además, se añade que los brotes identificados son los fáciles de identificar, no se han buscado todos, por lo que no se puede extrapolar al conjunto”. Resume: “Lo que sucede en la realidad no lo sabemos, estamos en la indefinición”.

389 brotes en bodas, funerales, bares o transporte

El ámbito social, con 265 brotes acumulados y 1.836 contagios asociados, mantiene actualmente seis brotes activos y 35 infecciones. A este entorno hay que sumar los 124 brotes del epígrafe denominado “mixto”, que la Consejería de Sanidad desglosa en una nota en la que explica los lugares a los que corresponde cada epígrafe. El de “colectivos y actividades sociales” corresponde a “bodas, bautizos, eventos y reuniones familiares, funerales, locales de ocio, hoteles y establecimientos de restauración, centros y actividades deportivas, comercios, transportes, viajes extracomunitarios, etcétera”. Si se suman ambos apartados, son 389 los brotes y 2.882 los contagios relacionados.

Tras el ocio, el lugar de trabajo: 249 brotes acumulados desde julio y 1.345 infecciones asociadas. Hay activos 16, vinculados a 75 contagios. Y muy cerca de esa cifra, los centros sociosanitarios —residencias de mayores, de menores, de discapacitados, centros de día y ocupacionales, entre otros— registran en estos últimos siete meses 248 brotes, en los que se han infectado 4.165 personas; es el ámbito con más contagios. En este momento mantiene activos 27 brotes que afectan a 400 personas.

Es ya en cuarta posición donde se coloca el ámbito unifamiliar, con 236 brotes acumulados y 1.089 casos. Hasta ahora, la Consejería de Sanidad tampoco había informado sobre cuántos de estos brotes se producían dentro de los hogares. El argumento era el protocolo vigente, indicado más arriba. También dentro de la familia, pero en varios domicilios, la región contabiliza desde verano 83 brotes, con 606 casos; de los que hay dos activos, con 18 contagios. Aquí, puntualiza el epidemiólogo Fernando García, “hay que recordar que el virus no surge por generación espontánea dentro de las casas, hay alguien que lo mete y hay que saber cómo ha llegado ahí”.

Los centros educativos, con 192 brotes acumulados y 1.205 infecciones relacionadas, son el quinto ámbito con más contagios; mantiene ahora 30, vinculados a 216 casos. Tras estos, los centros sanitarios, con 77 brotes desde julio que han afectado a 1.205 personas. Siguen activos 11, con 293 infecciones.

En penúltimo lugar, el ámbito “otros” (asociado a centros penitenciarios, residencias de estudiantes y colegios mayores o comunidades religiosas cerradas), con 69 acumulados y 1.165 contagios relacionados, de los que se mantienen activos cuatro brotes y 58 contagios. Y por último los colectivos vulnerables —”centros de acogida, albergues, pisos tutelados, pateras [sic], otros”, explica el documento—, que contabiliza 33 brotes y 299 infecciones asociadas, de las que solo hay activas cuatro, relacionadas con el mismo brote.

Aquí se puede ver el boletín epidemiológico de la Comunidad de esta semana

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