No habrá cine en el parque de la Bombilla por primera vez en 25 años

No habrá cine de verano este año en el parque de la Bombilla de Madrid. El retraso en la licitación del servicio, publicado por el Ayuntamiento el pasado 1 de julio, aplaza el inicio del festival al 20 de agosto, por lo que sus organizadores han renunciado a llevarlo a cabo si no se adelanta la fecha. David Lluesma, hijo de los fundadores de este festival y actual director, asegura que el ciclo pierde su esencia si comienza tan tarde: “Sabemos que en septiembre ya no va a funcionar; empiezan los colegios y ya no es verano, hace más frío como para estar al aire libre. No es lo mismo”.

Aquí [el festival] se asocia al verano de los que nos tenemos que quedar en Madrid. Nuestros vecinos y vecinas iban mucho y ahora nos dejan sin ninguna alternativa cultural para estos meses

Alberto Colomo, presidente de la Asociación Vecinal Manzanares-Casa de Campo

Madrid Destino, empresa municipal dependiente del Área de Cultura del Ayuntamiento, alega que la demora se debe a que, en un principio, era la Junta de Distrito de Moncloa-Aravaca la que iba a hacerse cargo del contrato. Finalmente, la tarea ha recaído en Madrid Destino, que ha incluido este festival en el marco de Veranos de la Villa.

El lío burocrático ha dejado a Madrid sin una de sus citas estivales con más solera. Durante 25 años, Fescinal (Festival de Cine al Aire Libre) ha celebrado un ciclo de cine al aire libre con casi 200 títulos ―la entrada costaba seis euros en la última edición, que iba del el 8 de junio al 8 de septiembre― en este parque junto al río Manzanares, en la zona de Casa de Campo. Lluesma explica que en realidad es mucho más antiguo: comenzó hace 36 años, en el año 1984, en el Parque del Retiro. Desde entonces pasó por distintas localizaciones hasta asentarse en el parque de la Bombilla.

El asunto llegó el pasado jueves 9 al pleno de la Junta de Distrito de Moncloa-Aravaca, sesión en la que los grupos municipales de Más Madrid y PSOE recriminaron a la concejala del distrito, Loreto Sordo Ruiz (PP), que no interviniera para salvar el Cine de la Bombilla. La presidenta argumentó que no tiene competencias en el proceso de licitación: “Los plazos los tramita Madrid Destino. [La concejala] no va a hacer nada porque no puede hacer nada”, indica una portavoz del grupo municipal del Partido Popular.

Para los vecinos del barrio de Casa de Campo y Principe Pío, el festival es algo suyo. “Aquí, se asocia al verano de los que nos tenemos que quedar en Madrid. Nuestros vecinos y vecinas iban mucho y, ahora, nos dejan sin ninguna alternativa cultural para estos meses”, se queja Alberto Colomo, presidente de la asociación vecinal Manzanares-Casa de Campo, que aglutina a 300 vecinos. “La gente quiere seguir teniendo el cine ahí”, continúa María Ángeles, vicepresidenta de la asociación. “Es muy importante para nosotros, por las películas, por los coloquios con directores que traen y porque hacen un graffiti en el muro del parque. Es una cosa muy nuestra”, asegura la vicepresidenta.

El tirón de este ciclo, que conserva el sabor del cine de pueblo, se extiende a todo Madrid. Anabel del Salto, vecina de San Blas de 50 años, lleva desde los 20 yendo a Fescinal. “Voy todos los años desde que estaba en el Retiro. Con mi pareja, con mis amigos, con mis sobrinos... es muy tradicional del verano en Madrid”.