Sororidad creativa
Las actividades ligadas al 8-M reúnen a artistas que comparten procesos de trabajo y reivindican la importancia de conocer a más mujeres referentes
Se dan consejos, comparten procesos de trabajo y se animan las unas a las otras. Las directoras Carla Simón y Clara Roquet, la guionista Isabel Peña, la ilustradora Isa Muguruza y la cantante y diseñadora Ariadna Paniagua han participado esta semana en distintas actividades organizadas al hilo del 8-M, Día Internacional de la Mujer. Las tres primeras acudieron a la Academia de Cine a la presentación del documental Women Make Film, de Mark Cousins, que reivindica el trabajo de cineastas ignoradas. Con narración de Tilda Swinton, muestra fragmentos de películas de 183 directoras.
Cifras desoladoras. “Hay otra Historia del Cine que no nos han contado. Viendo el documental te sientes muy agradecida, pero a la vez avergonzada por no conocer a esas mujeres”, decía Carla Simón sobre Women Make Film. La autora de Verano 1993, que fue premiada en la Berlinale y en los Goya hace dos años, hizo su película con un equipo mayoritariamente formado por mujeres en todos los departamentos. “Somos todavía muy pocas haciendo cine. Las cifras son desoladoras. Tenemos que seguir hablando de esto para que cambie”. La directora y guionista está trabajando de lleno en su nueva película, Alcarràs. “Es sobre una familia muy grande que cultiva melocotones en un pueblo de Lleida”, adelanta. El rodaje comenzará en julio. “Estamos ahora con el cásting. Es un proceso muy largo”. En los agradecimientos de su ópera prima estaban presentes directoras como Mar Coll, Nely Reguera, Ginesta Guindal o Celia Rico. “Desde el principio nos acompañamos”.
Colaboración continua. Carla Simón y Clara Roquet se conocen desde antes de que una se fuese a Londres y la otra a Nueva York a ampliar sus estudios gracias a recibir la misma beca. Las dos han leído sus respectivos nuevos guiones. Se los pasan y se aconsejan. La coguionista de 10.000 km, Petra o Los días que vendrán está terminando su primer largometraje como directora, Libertad. Lleva días acostándose de madrugada trabajando en la postproducción. La película cuenta la historia de dos adolescentes durante un verano en un pueblo costero. “Quería hacer esta película porque es muy mía. Me da miedo que piensen que ahora solo quiero dirigir y no me llamen como guionista”. Belén Funes, último Goya a la dirección novel por La hija de un ladrón, fue la script de Libertad. Otro ejemplo de colaboración. De Women Make Film la directora y guionista valora la importancia de crear referentes. “Yo no conocía a ninguna directora hasta que descubrí a Isabel Coixet”.
Cuaderno lleno. “Me encantaría haber visto este documental a los 15 años en lugar de los 36”, decía Isabel Peña al acabar la proyección. “Tengo el cuaderno lleno de nombres de películas de directoras que quiero ver”. De la mayoría de esas mujeres nunca le hablaron en sus años de formación. “Al 98% no las conocía”. Estudió Comunicación Audiovisual en la Universidad de Navarra y después Guión en la ECAM, donde conoció a Rodrigo Sorogoyen. Es autora junto al cineasta de los guiones de Stockholm, Que Dios nos perdone, El Reino y Madre. Su último proyecto juntos es la serie Antidisturbios. “Ha sido un viaje brutal. Es un mundo que ha resultado más interesante y complejo todavía de lo que esperábamos”. Ella no se plantea pasar al otro lado de la cámara. “Al lado oscuro no me voy a pasar. Creo que me queda muchísimo por aprender como guionista. Cuando veo a mi socio dirigir veo que hay que tener una aptitud y un talento que yo no tengo para esa labor ingente. El cine es una cosa muy seria. Hay que ser muy exigente”.
Apoyo mutuo. Isa Muguruza es una de las artistas participantes en la exposición Woman is Art, que se celebra en el Hotel ME Madrid (Plaza Santa Ana, 14) hasta el 30 de marzo. “Me hizo mucha ilusión que me llamaran para participar porque me entusiasma la idea de visibilizar el trabajo de mujeres de distintos ámbitos”. Su obra Feminidad comparte espacio con la de otras artistas que le gustan especialmente, como Mercedes Bellido y Sara Herranz. “Cuando era pequeña no conocía a ilustradoras. Solo a Jordi Labanda. Era superfan”. Tras estudiar Publicidad y Diseño Gráfico, empezó a trabajar en Tantanfan, donde producen agendas, libretas, láminas, camisetas, objetos de papelería y muchas otras cosas junto a artistas. “Allí me di cuenta de que era posible vivir de esto. Moderna de Pueblo fue la que me animó a dedicarme a la ilustración”. Ellas también practican la sororidad. “Muchas ilustradoras somos amigas de verdad y nos apoyamos las unas en las otras”. Con su estilo ultrarreconocible, Isa Muguruza ha ido haciéndose un nombre los últimos dos años. A finales de mes saldrá su primer libro, Venuscentrismo. “Imagino qué pasaría si en lugar de regir el Olimpo Zeus lo hiciera Afrodita”.
Coser y cantar. Ariadna Panigua es la voz de Los Punsetes. Nunca le ha vestido otra persona para subir al escenario. Desde su debut ella misma se ha hecho la ropa. “Estudiaba Diseño de Moda cuando empezaba con el grupo. Para el primer concierto me puse un vestido que estaba haciendo para una clase de modelaje. Para el siguiente concierto quise ponerme uno nuevo. Desde entonces me propuse no repetir y así ha sido hasta hoy”. Tiene cerca de 200. “Los guardo en un trastero”. De allí ha salido uno para la exposición Woman is Art. Es un conjunto de chaqueta y falda en jaquard de algodón que completó con una jaula con un loro de poliespán como tocado. Diseña, patrona, corta y cose todo su vestuario. Después de lucirlo, sube a su cuenta de Instagram, @ariadnapunsetes, fotos de otras personas con sus trajes. La Bien Querida, Soleá Morente o Carlotta Cosials de Hinds están en su galería. “Si educamos en igualdad acabará habiendo un cambio estructural”.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.